107 animales entre tortugas, loras, guacamayas y otras aves que habían sido víctimas del tráfico de fauna y que fueron rehabilitadas por la CVC parten hoy en un vuelo de la Fuerza Aérea Colombiana hasta Barranquilla y Cartagena donde recobrarán su libertad y llegarán a sitios adecuados para cada especie.
“Es un cargamento de 625 kilos de seres vivos que vamos a devolver a sus hogares, en la naturaleza, y a sitios en los que estarán confortables; todo esto gracias a la comunidad y autoridades que los sacaron del tráfico de fauna o los rescataron. Su recuperación fue posible gracias a la labor de los técnicos y veterinarios que los atendieron y rehabilitaron y gracias a la Fuerza Aérea Colombiana que los transporta de regreso a la libertad”, expresó Rubén Darío Materón Muñoz, director general de la CVC.
En el vuelo va un cargamento de trece aves que incluye cotorras, guacamayas, coclís, un pellar y un tucán con destino a la Sociedad Portuaria en Cartagena. Otro cargamento de 90 animales que incluye distintas especies de guacamayas y tortugas que irán a Barranquilla para su liberación. Por último, tres loras y un flamenco serán reubicados en la fundación botánica y zoológica de Barranquilla.
Todos estos animales están vivos gracias a la labor de los técnicos y profesionales del Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre, CAV, de la CVC en San Emigdio, en zona rural de Palmira, lugar donde fueron atendidos y rehabilitados durante los últimos meses. Desde allí serán llevados hasta la Base Aérea Marco Fidel Suárez donde serán embarcados en un avión de transporte de la Fuerza Aérea Colombiana.
El dispositivo se ha denominado ‘Operación Regreso a la Libertad III’, porque ya en marzo de 2015 y junio de este año se realizaron operativos similares, el primero llevando 148 animales hasta el Amazonas y el segundo 200 animales al Cesar.
Los animales llegaron a manos de las autoridades por incautaciones, rescates y entregas voluntarias al CAV de la CVC, donde fueron examinados, se les abrió una historia clínica, se desparasitaron y se les dio tratamiento médico veterinario. Además se les dio una dieta similar a la que tienen en el medio natural y se les evaluó física y comportamentalmente para ver si podían ser dependientes del hombre o si podrían sobrevivir en su medio natural.
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