Acusan a taxis latinos de violar reglas en Massachusetts

Una guerra entre dueños de taxis con licencia y conductores de otros vehículos que prestan el llamado servicio de librea ha adquirido matices raciales en el centro de Massachusetts. Dos populares empresas latinas en barrios de inmigrantes de la ciudad de Worcester se ven amenazadas con cerrar si no pagan miles de dólares en multas. Los dueños de Ecua Limo y New Worcester Limo dicen que las multas impuestas por supuestamente incumplir con las normativas municipales son injustas. Las empresas de taxis de librea son un servicio donde se solicita por anticipado el traslado en el vehículo. La normativa municipal dice que con estas empresas los clientes han de reservar un taxi con 12 horas de antelación. Se les prohíbe además recoger a pasajeros en la calle o a la salida de una tienda. “Este servicio se trata de transportar a la gente pobre”, dijo Sam Rosario, vocero de las compañías de librea. “Se opera en zonas donde por años ha sido difícil conseguir un taxi. Nuestros conductores hablan español y los pasajeros se sienten cómodos. Sin embargo, los dueños de Red Cab y Yellow Cab dicen que las reglas, impuestas hace un par de años, deben impedir a los taxis de librea operar ilegalmente como si fueran taxis con licencia. Señalan que las compañías de taxis tradicionales no pueden competir contra las de librea, que pagan una fracción de los costos por seguro. Los conductores de taxis con licencia pagan entre 11.000 y 13.000 dólares anuales, mientras que los de librea desembolsan unos 3.000. Las compañías de taxis tradicionales se quejan también de que los taxis de librea afectan su negocio porque cobran tarifas fijas y más bajas, en vez de basar su cuota en las cifras indicadas por los parquímetros, que son obligatorios en la ciudad. El concejal Joseph Petty dijo que la ciudad lidia con el mismo problema desde hace años y que espera que se encuentre una solución pronto.