Adiós a quien modernizó la arquitectura de Cartagena

Rafael Cepeda Torres, fallecido el miércoles de esta semana (9 de septiembre), fue un cartagenero ilustre y hecho a pulso quien modernizó la ciudad con sus diseños arquitectónicos. Edificios emblemáticos como el del Banco Popular, el Edificio Araújo, el Hotel Hilton o el Hotel Capilla del Mar figuran entre sus diseños y construcciones, siendo edificio de la Superintendencia de Sociedades, en Bogotá, una de sus ejecuciones más sobresalientes. Cepeda Torres nació el 28 de octubre de 1925. Estudió Arquitectura en la Pontificia Bolivariana de Medellín, ayudándose a pagar los estudios tocando su violín, porque era un gran melómano, y gracias a su alto desempeño profesional obtuvo el reconocimiento y el respeto del gremio del diseño y la construcción en la ciudad, porque ejerció su profesión con pasión y disciplina. Incluso, su legado llegó hasta Santa Marta, donde construyó el Edificio de Los Bancos, frente a la Plaza de Bolívar. Otras construcciones paradigmáticas de su legado arquitectónico y visual en Cartagena, son: construyó el Centro de Convenciones Cartagena de Indias, diseñado por Esguerra, Sáenz y Samper; diseñó y construyó el Hospital Universitario, el Banco de Colombia, en el Centro; el Edificio Suramericana y el Banco Royal. Su visión del diseño y la arquitectura fue evolucionando hasta incursionar en los edificios contemporáneos, como El Mirador, Gloria, La Concha, Villa del Este, Ventura, Natalia, Sofía y Diana. Estas obras están levantadas en Bocagrande, Castillogrande y El Laguito. LA PERSONA Si el diseño y la construcción fueron la pasión de Rafael Cepeda Torres, la familia fue su columna vertebral. Tuvo seis hijos que crió con amor. Sus amigos y familiares lo recuerdan como un miembro de familia maravilloso. Excelente hijo, hermano, esposo y padre amoroso. “Cada uno de sus hijos es un espejo de su carácter, de sus valores, de sus principios, que prolongarán en las generaciones venideras la estirpe impecable de su ejemplo”, expresa con sentimiento Alberto Araújo Merlano, amigo de toda la vida de Cepeda. Rafael Cepeda Torres perteneció a la generación de hombres íntegros con convicción e ideales. Gracias a su talento con el violín, Cepeda se pagó sus estudios en Medellín tocando en la Sinfónica de Antioquia. Perteneció también a la Filarmónica de Cartagena y fue presidente y miembro de la Junta Directiva del Club de Pesca. En 1950 fundó Civilco Ltda junto a José Antonio Covo y Fulgencio Lequerica, empresa con la que materializó sus sueños arquitectónicos en la ciudad. Por el legado arquitectónico que le dejó a Cartagena y por su generosidad como ser humano, sus familiares y amigos despiden a un hombre ejemplar.