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Edurbe contrató $86.500 millones con el Distrito

ANÍBAL THERÁN TOM

25 de febrero de 2011 12:01 AM


En los últimos años Edurbe ha sido intermediaria para todo tipo de obras, como pavimentación de calles, reparcheos, construcción de colegios y hospitales, entre otras. Esto la ha convertido en el blanco de críticas por parte de veedores y defensores de la ley de contratación pública, quienes sienten que no hay equidad al otorgar los contratos.
Lo cierto es que Edurbe sufrió un cambiazo a través de los tiempos. Nació hace 30 años para algo específico: sanear los cuerpos de agua de la ciudad con miras a convertirlos en un medio de transporte, pero hoy es una entidad contratista, que la mantiene en el ojo del huracán.
En los últimos tres años ha suscrito más de 100 convenios interadministrativos con el Distrito, muchos de los cuales se han ejecutado y otros se han atrasado.
Hace una semana, el Distrito otorgó adiciones presupuestales a varios contratos que ejecuta Edurbe y que presentan un atraso sustancial. Se adicio-naron $1.400 millones para el Hospital de Nuevo Bosque; $6.200 millones para el Hospital de San Fernando; $100 millones para el Hospital de El So-corro; y $700 millones para Canapote.

“No es fortín político”
Aunque las críticas arrecian, la alcaldesa, Judith Pinedo Florez, ratificó que Edurbe no es fortín político de nadie. “Las cosas se están haciendo bien. No se está haciendo contratación directa como lo han querido hacer creer, hay procesos apegados a la ley”.
“Nos costó trabajo ordenar a Edurbe porque arrancamos en un proceso donde se encontraron varias obras sin terminar, pero se logró terminarlas. A partir de 2008 la legislación cambió y sobre la base que obliga a contratar con toda la normatividad pública y Edurbe se acoge a la ley.
El 16 de enero de 2008 entró en vigencia la ley 1150 de 2007, que ordenó a todas las entidades publicas someterse a unos principios de contratación pública. No se puede comparar en materia de contratación a la Edurbe de antes y a la de después del 2008”, dijo la Alcaldesa.
Judith Pinedo Flórez reconoce que Edurbe ha estado en el ojo del huracán “y no es fácil superar esa desconfianza. Edurbe debe responder por los procesos licitatorios que se realizan al interior de esa entidad para realizar compras y contrataciones”. 
Por último, la Alcaldesa afirmó que el Distrito seguirá realizando convenios interadministrativos con Edurbe porque es una entidad que cumple con la realización de buenas obras.

Habla Mainero
Por su parte, Augusto Mainero Román, director de Edurbe, advierte que en los últimos años se han manejado unas 100 obras, algunas con contra-tiempos y otras no.
Ante la pregunta de por qué cree que  el Distrito escoge hacer obras con Edurbe y no realizar licitaciones públicas, Mainero Román señala: “Tengo entendido que la Alcaldía realiza licitaciones públicas. Es más, hasta el 31 de diciembre de 2010, el Distrito firmó convenios con Edurbe por $86.500 millones y realizó licitaciones públicas por valor de $157.500 millones. De estos recursos, solo $30.900 millones se han usado para contratación di-recta de mano de obra calificada y no calificada y el resto, $50.400 millones usados para comprar materiales y otro tipo de servicios, se han invertido mediante convocatorias públicas, todas apegadas a la ley”.
Señaló que contratar con Edurbe tiene muchas ventajas para la Administración. Una de ellas es que los excedentes en los contratos son reinvertidos en las obras de caños y lagos. Por ejemplo, el año anterior se limpió la laguna del Cabrero y la Ciénaga Las Quintas. Otra ventaja económica impor-tante es que con Edurbe no existe un sobrecosto del 5% que se genera cuando la contratación es directa y lo más importante es que el presupuesto que hace el Distrito para contratar con Edurbe, no está sujeto a modificaciones, como lo permite la Ley 80”.
Mainero Román señala que en Edurbe no hay injerencia de políticos y dice que “en mi presencia, se adjudican las residencias (de ingenieros) de las obras en un esquema ciento por ciento técnico, soportado en la experiencia, las capacidades y conocimiento del ingeniero. Hay una base de  datos de ingenieros y se tiene en cuenta la experiencia, para contratar. Es el residente quien dirige la obra y quien contrata la mano de obra no calificada, que tradicionalmente se escoge de la zona donde se ejecuta por decisión de la Alcaldesa.
“El presupuesto de la obra lo lleva Edurbe y maneja y suministra de manera directa los materiales. Ahora se maneja el sistema de subasta inversa, lo que en los últimos 12 meses le ha generado ganancias al Distrito por encima de los 500 millones de pesos.
“Por otro lado, los equipos que se necesitan para desarrollar la obra son contratados en un banco de empresas locales, a las cuales se les exige cum-plimiento”.
El funcionario indicó que Edurbe es una empresa responsable en la ejecución de las obras. “En este sentido hay una información tergiversada. Por ejemplo, el último contrato que tuvo Edurbe en el Hospital de San Fernando se terminó en julio del año pasado porque el Distrito no había conseguido los recursos. Sin embargo, la gente culpa a la empresa. Aunque sí hay obras que se han atrasado de Edurbe, como le pasa a cualquier contratista, por problemas de la ola invernal o por suministro de materiales especializados.
“En promedio los colegios se hacen entre 10 y 12 meses. En este momento Edurbe, para arrancar una obra, antes de la fecha inicial debe tener un presupuesto aprobado. Es decir, que Edurbe tenga la certeza que con los recursos que el Distrito nos da podamos terminar la obra y por último el lista-do de materiales. Todo se soporta en el sotwfare Construplan”.

“Licitaciones, son mejores”: Murra
El veedor e ingeniero William Murra Babum, quien ha librado una lucha contra la entidad desde hace varios años e inclusive ha instaurado denuncias ante los entes de control, recalca que no está de acuerdo en que se obvien licitaciones públicas para contratar con Edurbe.
“La posición de la representación gremial de Aciembol, respaldada por Aciem Nacional es que la suscripción de convenios interadministrativos con Edurbe es una forma de hacerle esguince a la ley para obviar postulados de publicidad (información pública a la ciudadanía), transparencia (participa-ción masiva de oferentes), economía (al reconocérsele honorarios por administración de los recursos a Edurbe del 7% o 9,5% es un mayor costo que finalmente cancela el Distrito), eficiencia (casi todos los convenios se realizan sin diseños y planos definitivos, lo que hace que a todos se les tenga que adicionar recursos o quedan construidos con debilidades técnicas)”.
“Si bien es cierto que antes de la ley 1150/07 y el decreto 2474/08 los convenios interadministrativos no requerían de publicidad, hoy, o sea, des-pués de esas normas, el Distrito está obligado a dar a conocer al público a través de la web sus intenciones con las debidas justificaciones, cosa que no hacen en la Alcaldía y además Edurbe no puede hacer olímpicamente invitaciones a través de publicaciones en una cartelera interna que ni el propio gerente sabe dónde queda”.
Recalca que la información que tiene Aciem es que entre enero 2008 y diciembre 31 de 2010, el 66,43% de las inversiones en estudios, diseños y obras de infraestructura se ha ejecutado o están ejecutando a través de esos convenios, el 45,25% están sufriendo atrasos considerables en su ejecución y el 33,56% requieren de adiciones presupuestales para su culminación.
“En los 7 años de las alcaldías de Diaz Redondo, Barboza y Curi, el índice de convenios no superó el 20% del total de inversiones en diseños, estudios y obras públicas. Tamaña diferencia”.

Sistema de contratación de Edurbe
Edurbe, como contratista de obras del Estado, tiene el compromiso de llevar a cabo las obras solicitadas a través de los convenios administrativos, para lo cual cuenta con un software de planeación y control de obras y divide las necesidades de cada una en tres grandes grupos.
Materiales. Edurbe adquiere los materiales para atender las necesidades de las obras a través de distintos mecanismos que le permiten obtener bene-ficios económicos para el contratante (Estado).
Subasta inversa.  Se define un precio máximo, se cuelgan los pliegos en el portal de contratación del Gobierno nacional y se logran descuentos por medio de pujas de los proponentes en una audiencia pública. En los últimos doce meses Edurbe ha adelantado más de ocho (8) subastas para compra de acero, cemento, concreto, asfalto, materiales de ferretería, materiales pétreos, silletería del estadio y otros, logrando descuentos del orden de $560 millones de pesos. Hay en trámite subastas de cemento y tubería de PVC.
Procesos de Menor Cuantía. A través de este mecanismo, que tiene un tope máximo en Edurbe de $230 millones, se logran compras puntuales co-mo por ejemplo las cubiertas de las escuelas, materiales para instalación de gases medicinales etc., se cuelgan las condiciones en el portal de contrata-ción del Gobierno  nacional y los proponentes presentan su mejor oferta económica en sobre cerrado luego de haber cumplido los requisitos jurídicos, administrativos, técnicos y de calidad del producto a comprar.
Proceso de Mínima Cuantía. Hasta $23 millones, se solicitan tres cotizaciones a través de publicaciones en el medio de divulgación exigido por la ley y se selecciona la mejor en función de precio, tiempo de entrega y calidad.

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