El Colombiano cumple cien años

Asumir la innovación de una empresa que ha tenido éxito durante 100 años es un acto casi irresponsable.
Pero cuando la interdisciplinariedad de un equipo inteligente debate con criterio en busca de una meta común, la locura se decanta, surge la creatividad exigida por los argumentos y aparecen las soluciones obvias y las sorprendentes.
El ECOlab es un medialab creado por el grupo El Colombiano para hacer investigación y desarrollo en una apuesta por la creatividad y el talento que impone el futuro.
En este trabajo metódico y riguroso se materializan ideas a través de proyectos que persiguen resultados tangibles. El rediseño de El Colombiano es el producto del respeto y la pasión por buscar que forma y función se fundan, tal como lo exigen los productos impecables.

Opinión y análisis
Entregar la opinión de firmas de prestigio, entre ellas algunas del New York Times. Escritores como Germán Castro Caycedo y Alberto Salcedo Ramos; críticos en temas diversos, que tienen que ver con el arte, la economía y la política, entre otros, sumados a jóvenes talentos. Noticias con valor agregado.

Pensar como lectores
Reconocer la importancia de un lector activo y participativo. Un lector culto, que opina, que quiere siempre más y que busca en El Colombiano actualidad, interpretación, rigor. Un lector cada vez más exigente que pide información, contexto, análisis e investigación.

Forma y función son lo mismo
Concentrar el manejo de contenidos y ciclos de información en el marco de la relevancia. Esto se logra con la mezcla de los géneros periodísticos, donde crónicas, entrevistas, reportajes e informes especiales se unen a las grandes historias. El reto es convocar con lecturas de múltiples niveles.

Menos es más: Otras formas de decir
Recuperar la imagen en un mundo multimedia, como creadora de ritmos. Menos es más, se convierte en la clave. En un periódico esto significa menos cantidad, más calidad. Fotografía, ilustración, infografía se conectan para ofrecer un producto importante, interesante y sorprendente.

El futuro es el presente
Este es un periódico del presente, de ese presente con futuro en el que el impreso se complementa con el mundo digital. Los ciclos informativos se manejan en múltiples plataformas. A la información y al análisis se unen el servicio y la lúdica, en un diálogo permanente con las audiencias.

Cambiar para seguir siendo líderes
El Colombiano cumple hoy 100 años y no por ser un buen diario o un buen negocio sino porque es desde sus comienzos una institución social, una marca periodística y comercial antioqueña por excelencia abierta a todos los colombianos dentro y fuera de Medellín.

Esta empresa sabe que el verdadero propietario de este diario no son sus accionistas sino sus lectores y anunciantes, y por eso, como ellos, está cambiando: porque sólo los líderes cambian, y cambian para seguir siendo líderes.

Los grandes periódicos fueron siempre "catedrales con alma", casas abiertas a todos los vientos pero con principios y valores firmes: ellos son los que las hicieron necesarias por los servicios prestados antes sólo a lectores, y ahora también a otras audiencias y comunidades desde y más allá del papel.

Cuando Innovation recibió el encargo de repensar el modelo periodístico de El Colombiano y también la transformación multimedia de su organización corporativa, lo hizo sabiendo que bastaría con pensar en qué harían las familias fundadoras de este diario si hoy tuvieran que re-inventarlo.

Porque cuando un diario se hace centenario eso significa que el impulso fundacional nunca se detuvo. Y el cambio de hoy lo demuestra: las nuevas generaciones de las familias accionistas siguen más entregadas que nunca a lo único que es importante en una empresa periodística: servir a lectores y anunciantes interpretando sus deseos y respondiendo a sus necesidades con información periodística y comercial de calidad.

Nos dicen ahora que El Colombiano está cambiando. No es verdad: lo estuvo siempre y, por eso, en su centenario tampoco deja de cambiar.

Lo hizo siempre, lo hace hoy y no dejará de hacerlo. Esa fue y será la garantía para celebrar en 2112 otro centenario más.

¡Enhorabuena  y por muchos años!