De igual forma, en una reunión con los gobernadores de la Costa en la Gobernación de Bolívar, Everardo Murillo, director del Fondo Nacional de Calamidades, anunció que los recursos hacen parte del billón de pesos que destinó la Presidencia de la República para nutrir ese recién creado organismo, y serán manejados directamente por los gobernadores, bajo la vigilancia de los organismos de control.
Al término de la reunión se determinó entregar recursos a los gobernadores de los departamentos afectados por el invierno, de acuerdo al número de familias damnificadas. Según Murillo, al Atlántico se le enviarán $9.249 millones; al Cesar, $576 millones; a Córdoba, $15.424 millones; a Guajira, $3.143 millones; a Magdalena, $18.612 millones; y a Sucre, $10.104 millones.
Los gobernadores de Bolívar, Alberto Bernal Jiménez y Atlántico, Eduardo Verano de la Rosa, se convirtieron en los primeros en el país en firmar un compromiso ético en el manejo y destino de los dineros que asignó el Gobierno nacional para atender a los damnificados por el invierno.
Los mandatarios de Bolívar, Alberto Bernal Jiménez y Atlántico, Eduardo verano De la Rosa, se comprometen junto a todos sus funcionarios a darle un manejo transparente y eficiente a los todos los recursos que el gobierno del presidente Juan Manuel Santos gire para atender las emergencias provocadas por las lluvias en Bolívar.
También se comprometieron a construir la información de damnificados más precisa posible, a rectificarla y validarla cada vez que sea necesario. Los gobernadores declararon ser conscientes de que los recursos que entrega el Gobierno nacional son limitados y que los aportes van exclusivamente a quienes tienen derecho por su afectación o a obras prioritarias relacionadas con los efectos de la lluvia.
Igualmente, en el documento firmado comprometen esfuerzos para proceder con celeridad, comprendiendo la angustia humana que producen las situaciones de calamidad, a crear los mecanismos de comunicación permanente que permitan difundir a todos los niveles de la población con transparencia, claridad y suficiencia todas las decisiones del Gobierno nacional; y a hacer el más pulcro uso de los recursos que sean transferidos por la nación o por entidades públicas o privadas, locales o extranjeras para atender la tragedia.
Atención en el país
El director del Fondo Nacional de Calamidades, Everardo Murillo, aprovechó la reunión con los mandatarios del Caribe para anunciar que el Gobierno nacional dispuso entregar $145.960 millones de pesos para atender a las miles de familias afectadas por el invierno.
De esos recursos el 62% son para las 226.580 familias de la región Caribe, dineros que desde el próximo martes podrán retirar los gobernadores de la Fiduciaria La previsora.
Murillo manifestó que estos dineros serán utilizados para comprar alimentos, kits de aseo y apoyos para los arriendos.
Los recursos podrán manejarlos a través de ONG, cajas de compensación familiar, Cruz Roja, Defensa Civil, Policía, Ejército o Armada Nacional, y serán los gobernadores quienes escojan la entidad que trabajará con ellos.
Según Murillo, para empezar este año con la primera etapa de reconstrucción de las zonas afectadas por la lluvia, el Gobierno Nacional destinó un billón de pesos como complemento a los cerca de 200 mil millones destinados para superar la emergencia en todos los departamentos del país, donde hay estragos por las aguas.
Según Everardo Murillo, con el fin de evitar que este proceso se preste para que políticos inescrupulosos lo usen en sus campañas, se dispondrán de organismos de control que acompañaran el proceso, tales como Procuraduría Nacional, la Defensoría del Pueblo y la Contraloría General, quienes activarán una red nacional de veedurías para blindar el proceso de obras de reconstrucción y ayuda humanitaria.
“Se harán rendiciones públicas de cuentas en cada albergue y, adicionalmente, se tendrá el acompañamiento de firmas veedoras que pueden detectar fraudes, como por ejemplo KPMG, Core y la firma Transparencia por Colombia, entre otras, además de la compañía de las Cámaras de Comercio. Pero los ciudadanos también pueden decir si las cosas no salen como ellos esperan”, explicó el funcionario.
Subsidios
Los damnificados por el invierno que vivan albergados y quienes hayan perdido su casa, recibirán un subsidio de arriendo de 200 mil pesos por tres meses y medio, y se incrementará si es necesario. A todo esto se suma el apoyo alimentario.
En Cartagena
“Lo importante de esta reunión de hoy es que tenemos aprobación del Gobierno en cuanto a la superación de trámites que hacían imposible la ejecución de las obras que se requieren para la reconstrucción inmediata, pues se iba mucho tiempo en el diligenciamiento de licencias ambientales, de construcción y habilitación de suelos, entre otros. La buena noticia, entonces, es que en la medida en que los entes territoriales sean ágiles, vamos a poder reconstruir rápidamente”, dijo la alcaldesa, Judith Pinedo.
Esto quiere decir que se podrá trabajar la reconstrucción de colegios, hospitales, viviendas y calles, mientras se tramita la licencia, operación que en otras ocasiones obstaculizaba los procesos para que se realizaran de forma rápida.
“Este Fondo está funcionando muy rápido, porque en la medida en que cada gobernación entrega la información, que no es un censo sino un registro de damnificados, se entrega rápidamente la ayuda a las familias registradas en cada gobernación y alcaldía capital”, aseguró la Alcaldesa.
“También podemos utilizar recursos de esta primera etapa humanitaria para realizar obras urgentes o comprar los equipos que se requieran para sacar el agua en las zonas inundadas. Se puede disponer hasta de 200 millones de pesos para ser utilizados en obras de emergencia y compra de insumos para estas”, añadió Pinedo.
En Cartagena las entidades que se encargarán de coordinar los subsidios de arriendo para los damnificados serán las cajas de compensación. 800 familias ya reciben estos recursos para cancelar arriendos temporales. Pero el gobierno de la Alcaldesa Pinedo trabaja para que los afectados reciban viviendas propias.
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