Un juez de Miami propuso a los familiares de Carlos Andrés Pérez depositar temporalmente "por dignidad" en una cripta los restos del fallecido ex presidente venezolano, mientras se resuelve en la justicia un pleito que ha impedido su entierro.
"Encuentro casi imposible la necesidad de reconciliar un entierro digno", manifestó Rothenberg dirigiéndose a los familiares de Pérez, que tienen posiciones encontradas sobre el lugar donde debe descansar el ex mandatario.
"Pero existe una forma ... enterrar al señor Pérez en una cripta y permitirle estar en paz dignamente mientras se resuelve el caso", explicó el juez tras indicar que mientras más tiempo permanece un cuerpo en un refrigerador más se transgreden las leyes que buscan impedir el sufrimiento de las familias.
Pérez _que fue presidente de Venezuela en dos oportunidades_ falleció a los 88 años el 25 de diciembre pasado en Miami, donde vivió desde comienzos de la década del 2000. Su cuerpo permanece embalsamado en una cámara de refrigeración de una casa funeraria del sur de la Florida mientras se dirime la disputa entre sus familiares de Caracas, que desean repatriar sus restos, y sus familiares de Miami, que desean enterrarlo en suelo estadounidense pues se oponen a que sea sepultado en Venezuela mientras esté Hugo Chávez en el poder.
Ambas partes han intentado dirimir la disputa de manera extrajudicial, pero ante la falta de un acuerdo acudieron a la justicia.
La audiencia del lunes es la primera en que ambas partes se presentan al mismo tiempo en persona ante el juez Rothenberg.
En representación de Blanca Rodríguez de Pérez estuvieron presentes Marta y Carolina Pérez, que viajaron desde Venezuela, y María Andreina González, hija de Marta y nieta del ex presidente.
Del otro lado de los bancos, en la primera fila frente al juez, se ubicaron Matos y sus dos hijas Cecilia Victoria y María Francia Pérez Matos.
También estaban presentes representantes de la funeraria Caballero Rivero Woodlawn.
Durante la audiencia que comenzó temprano en la mañana y se prolongó varias horas, el magistrado aseguró que si el juicio comenzara en marzo o abril, sería demasiado tiempo para mantener el cuerpo en el refrigerador y propuso por eso colocarlo en una cripta sobre tierra.
Pero de inmediato el abogado de Blanca de Pérez _que desde hacía ya varias décadas estaba separada del ex presidente_ objetó la propuesta del juez.
Juan Antúnez expresó que si los restos de Pérez eran enterrados, aunque fuera temporalmente, el caso judicial se terminaría.
Dijo que quería presentar todas las evidencias para demostrar que, como esposa legal, su cliente era la persona autorizada por las leyes de la Florida para decidir dónde debe ser enterrado el ex presidente, y amenazó además con demandar a la funeraria si el cadáver sale de la cámara de refrigeración para ser enterrado.
"Blanca Pérez es la mujer con la que él se casó en 1945, con quien tuvo seis hijos. Ella es la esposa", dijo una y otra vez Antúnez al juez. "Ella mejor que nadie conoce dónde debe ser enterrado", declaró el abogado.
Pero el representante legal de Matos, Martin Feldman, refutó esa posición y en un intento por descalificar a Blanca Rodríguez de Pérez dijo que "la evidencia va a demostrar que es una esposa extraña, que no convivían desde hace años".
Feldman, asimismo, pareció dispuesto a aceptar la propuesta del juez.
El magistrado, además, resolvió que Matos podía ser parte del proceso judicial, desechando así un pedido de Antúnez para que la compañera del ex presidente venezolano quedara al margen por no tener documentos legales que demostraran su relación con Pérez.
Durante la audiencia varios representantes de la casa funeraria explicaron cómo son los procedimientos para embalsamar cadáveres y María Francia Pérez Matos lloró al leer una carta que le envió su padre mientras permanecía arrestado en Caracas a finales de los años 90.
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