Padre borracho obliga a conducir a su hija de nueve años en EE.UU.

Una niña de 9 años le preguntó a la policía por qué la detenían si estaba “conduciendo bien” el vehículo de su padre, luego que éste le pidiera que manejara en la mitad de la noche por encontrarse ebrio, informaron el martes medios estadounidenses. La niña estaba sentada en un asiento para niños colocado en la camioneta roja, pero de alguna forma se las arregló para alcanzar los pedales e incluso tuvo el suficiente cuidado de usar el señalizador.     
“íYo me estacioné!”, dijo la chica, según la grabación de un video de vigilancia de una estación de servicio.     
Su padre, Shawn Weimer, de 39 años, originario de Brownstown Township, en el estado de Michigan, se jactó de su “conductora designada” antes de volver al vehículo estacionado en una gasolinera justo antes de las 3:00 am del 8 de octubre.     
“íNueve años! íNueve! Acelerador, freno, escucha, nos vamos y ella va a conducir. Estoy borracho”, dijo el hombre al encargado del bar, con una pronunciación ininteligible, mientras daba tumbos por la barra.     
Un ciudadano responsable, que dijo que le molestaba la forma en la que el hombre estaba tratando a quien denominaba “su pequeño ángel”, llamó a la policía y siguió a la camioneta para asegurarse que las autoridades los detuvieran lo antes posible, informó el periódico Detroit Free Press.     
La niña aparentemente había conducido con anterioridad, según dijeron las autoridades.     
“Ella lo estaba haciendo bien”, afirmó el detective de Brownstown Township, teniente Robert Grant a Free Press.     
“De hecho, por terrible que suene, la niña miró al oficial de policía y le preguntó: '¿por qué me detuvieron, si yo estaba manejando bien´? Increíble. Obviamente el oficial le dijo que era muy joven para conducir”, agregó.     
Los padres de la menor están separados y la niña estaba pasando el fin de semana con su padre. El hombre dijo a la policía que había sacado a su hija a pasear para darle una lección de conducción y se negó a someterse a una prueba de alcoholemia. La niña declaró a las autoridades que su padre había estado bebiendo whiskey toda la noche.     
El hombre enfrenta cargos por maltrato de menores y por ser un delincuente habitual.