París convocó a embajador venezolano por declaración de Chávez sobre Carlos

Francia convocó al embajador de Venezuela en París a raíz de declaraciones del presidente venezolano Hugo Chávez según las cuales Carlos Ilich Ramírez Sánchez fue injustamente condenado por terrorismo en Francia, informó el miércoles el ministerio de Relaciones Exteriores. “En cuanto tuvimos conocimiento de las declaraciones del presidente Chávez, hicimos una firme aclaración ante el embajador de Venezuela”, declaró el portavoz del ministerio Bernard Valero. “La justicia francesa condenó a Carlos a cadena perpetua por crímenes muy graves, por terrorismo y asesinatos. Es responsable de la muerte de varios franceses. Carlos nunca será para nosotros más que un terrorista”, insistió Valero. En un primer momento, el ministerio de Relaciones Exteriores se había abstenido de hacer comentarios sobre las declaraciones de Chávez acerca de su compatriota Carlos, al que reivindicó como a un “luchador revolucionario”. El presidente venezolano afirmó el pasado viernes que “la policía francesa lo secuestró; se lo llevaron secuestrado desde donde estaba viviendo en Sudán, lo metieron en un saco y se lo llevaron a París”. Valero precisó que el canciller francés Bernard Kouchner “responderá naturalmente” a la carta del Centro Simon Wiesenthal, organización de lucha contra el antisemitismo, que pidió al gobierno francés que “protestase firmemente”. Leyenda del terrorismo internacional de los años 70 y 80, este venezolano, nacido en Caracas en 1949, fue miembro del Frente Popular de Liberación de Palestina (FPLP) de Georges Habache y participó en actos contra intereses israelíes. Ramírez, capturado en 1994 en Jartum, fue condenado tres años después a cadena perpetua por el tribunal especial de lo criminal de París por el asesinato en 1975 de dos policías y un confidente en la capital francesa. A finales de 2010 o principios de 2011, debe organizarse un nuevo juicio por su presunta implicación en atentados perpetrados en Francia en 1982 y 1983. “El Chacal”, como se lo conoce, cumple su condena en la cárcel de Clairvaux, en el noreste de Francia. En 1975 también estuvo vinculado al secuestro de 11 ministros de la Organización de los Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en Viena. jlv/alm/acc/me