Primer aguacero grande del año trajo emergencias

Después de los intensos calores de los últimos días, cuando las temperaturas promediaron los 35 grados centígrados, ayer se desencadenó, poco después de las 12 del día, un aguacero en toda la ciudad. Fue una lluvia fuerte y prolongada de más de 2 horas, y no sectorizada como habían sido los chaparrones previos de semanas anteriores. Sin embargo, con el fenómeno natural de ayer se reportaron también los primeros estragos del año, los más delicados ocurrieron en el barrio 7 de Agosto (vecino de San Francisco y Daniel Lemaitre), donde hacia la 1 de la tarde más de media casa se desplomó al caerle un árbol de jobo. Por fortuna no hubo víctimas fatales. Dentro de la humilde vivienda se encontraban las señoras Primitiva Chaverra González y Dilia León González, quienes milagrosamente salieron ilesas, y sólo sufrieron golpes menores. La emergencia ocurrió en la casa con nomenclatura #16-51 de la Calle 77, en el barrio 7 Agosto, y fue atendida inicialmente por el Cuerpo de Bomberos. Al cierre de esta edición las afectadas esperaban la concurrencia de algún representante del Distrito para plantear la situación, en procura de empezar a buscar una salida. Leonor Valiente, hija de Primitiva, le explicó a El Universal que su progenitora quedó desamparada, porque ahora no tiene un sitio apropiado para vivir. Cuenta Leonor que el árbol cedió ante la peligrosa combinación de la lluvia torrencial y la brisa fuerte. OTRAS SITUACIONES El Cuerpo de Bomberos de Cartagena informó que en varios sectores de la ciudad se registraron hechos menores por culpa del aguacero que cayó después del mediodía de ayer. En Torices, en el sector de calle que conduce al barrio Nariño, se cayeron al menos 4 postes de redes de servicios públicos, lo que también generó mucho miedo entre los habitantes de la zona. Igualmente hubo árboles caídos, guayas del tendido eléctrico en el suelo, inundaciones pequeñas y otras emergencias menores en barrios como 7 de Agosto, La Esperanza, San Francisco, Bocagrande, Santa María, entre otros, informó el bombero Joel Loaiza. Desde este último barrio (Santa María) el ciudadano Róbinson Estrada le reportó a El Universal que las ramas más altas de una fronda cedieron llevándose por delante el cableado de alta tensión, lo generó peligro extremo para los resientes cercanos y transeúntes. Agregó que, presintiendo que podía pasar una desgracia (que por suerte no ha sucedido), en varias ocasiones le han requerido al Establecimiento Público Ambiental (EPA) ejercer inspección y control sobre el mencionado árbol, y esperan que ahora sí lo haga.