Preocupados se mostraron varios conductores de vehículos por los hurtos o intentos de atracos de que han sido víctimas en la avenida Pedro de Heredia, en inmediaciones del mercado de Bazurto.
Un hombre que fue víctima del robo de su celular con el engaño del aviso de la llanta pinchada, dijo que el paso lento por esa vía y la falta de vigilancia policial hacen el ambiente ideal para esa clase de delincuencia, practicada a la vista de todos y a cualquier hora del día.
“Yo pasaba frente a Bazurto y un hombre me hacía señas hacia una de las llantas. Como no lo entendí al principio, medio abrí el vidrio del carro que estaba detenido por el trancón, lo que dio pie para que el delincuente, disfrazado de vendedor de revistas, metiera el brazo por la ventanilla y me robara el celular. Cuando reaccioné, el hombre, de la mejor manera, eso sí, me dijo que le iba a partir el brazo y me tocó abrir más la ventanilla y ver cómo el delincuente se llevaba el celular. Intenté buscar un policía, pero no había”, relató el ciudadano.
Ayer, una mujer denunció a este medio la falta de vigilancia que se vive en todo el trayecto desde la estación de El Prado de Transcaribe hasta casi la entrada a Manga.
“Cuando pasaba por el sector donde estaba la antigua loma de Bazurto, segundo semáforo, pasadas las dos de la tarde, observé que en contravía venían unos cinco jóvenes, sentido Bazurto – María Auxiliadora. Uno traía como un balón en la mano, el cual lanzaron debajo del carro para obligarme a detener la marcha. Como no lo hice, golpearon duro el carro. Después me enteré que eso lo hacen para obligar a los conductores a detener la marcha y atracarlos entre todos. Después del susto, comencé a buscar para ver si veía a un policía y decirle lo ocurrido, pero nada. Ni siquiera del Datt había agentes en ese sector”, contó la mujer que pide al alcalde, Manolo Duque, desplegar operativos en ese sector, que está en manos de la delincuencia.
“Lo peor es que si uno se llena de nervios y arrolla a un tipo de esos, termina robada y hasta linchada, porque aquí la gente de bien ahora tiene que dejarse atracar de cualquiera que quiera hacerlo”, remató la mujer.
Otro conductor llamó la atención sobre el peligro que se vive en las noches por el constante tránsito de habitantes de la calle por ese mismo sector. “Cuando uno se los ve es encima de uno”, dijo.
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