La UE cumple con los compromisos medioambientales de Kioto

La UE respeta los compromisos fijados en el protocolo de Kioto de reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero y da así ejemplo al resto de países industrializados, a menos de un mes de la cita contra el cambio climático en Copenhague, afirmó el jueves la Comisión Europea. Muchos países, como España, acumulan un gran retraso, pero “el objetivo colectivo fijado en la UE será alcanzado, puesto que otros Estados van más allá de su objetivo nacional”, explicó el comisario de Medioambiente, Stavros Dimas, durante la presentación de los datos de 2007. La Unión Europea (UE) contaba con 15 miembros cuando suscribió el protocolo de Kioto y se comprometió a reducir para 2012 sus emisiones en un 8% respecto a sus niveles de 1990. Los 15 echaron a la atmósfera 4.040 millones de toneladas del equivalente de C02 en 2007, es decir, un 5% menos respecto a 1990, y deben llegar a 3.920 millones de toneladas en 2012. Según la Agencia Europea del Medioambiente, la reducción conjunta de estos países alcanzará en 2008 el 6,2%, pese a que sólo una minoría está haciendo los deberes. Así, Francia, Alemania, Gran Bretaña, Suecia, Grecia y Bélgica ya habían cumplido ampliamente sus objetivos en 2007. En cambio, Austria, Dinamarca, España, Finlandia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Holanda y Portugal “deberán seguir esforzándose”, señaló la Comisión Europea. En este grupo de alumnos rezagados, algunos países como Dinamarca redujeron sus emisiones entre 1990 y 2007, pero a un ritmo insuficiente, mientras que España e Italia, por ejemplo, no sólo no registraron una reducción, sino que además fueron hacia arriba. Las emisiones en España pasaron de 289,8 millones de toneladas a 442,3 millones, muy por encima de la meta fijada a 333 millones de toneladas para 2012. Los nuevos doce Estados miembros de la UE registraron por su parte una reducción del 12,5% en 2007 con respecto a 1990. “La UE demuestra así que respeta sus compromisos internacionales”, señaló el comisario Dimas, quien deploró que éste no sea el caso del resto de países industrializados. “Lo que hace la UE es una lección para los otros”, insistió Dimas, a menos de un mes de que se inicie la conferencia de la ONU en Copenhague, llamada a alumbrar un compromiso internacional que suceda al protocolo de Kioto.