Tras un mes de ser arrancado de las entrañas de su madre con una cuchilla de hoja, el bebé de Kellys Zapateiro Guzmán, quien luego del forzado parto fue asesinada, desmembrada e incinerada sobre una colchoneta; estaría próximo a ser entregado a su abuela, Iris Guzmán. Lea aquí (Tras el rastro de Kellys Zapateiro)
Desde la noche del 11 de julio, cuando con 8 meses de gestación fue obligado a nacer en manos de Josefa Cardona y el expolicía Andrés Díaz Zabaleta, asegurados por el macabro crimen de Zapateiro, consumado en cercanías a la estación de Policía del corregimiento de Manzanillo del Mar; el bebé no ha podido establecer lazos familiares. Lea también ("Dios no se queda con nada": madre de Kellys Zapateiro)
Hoy se encuentra en un hogar sustituto, bajo la custodia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), y según los pronósticos del director regional de la entidad, Jorge Redondo Suárez, es probable que, en menos de un mes, la custodia del pequeño sea otorgada a su abuela materna.
Señaló que un Defensor de Familia estudiará el caso y dictará la resolución que definirá la situación jurídica del pequeño.
“Realizamos dos encuentros de la abuela con el niño, seguramente la próxima semana se hará un tercer. Además programamos una visita domiciliaria y a partir de ahí, con todas las pruebas y los dictámenes que haga el sicólogo y el trabajador social, desde el punto de vista de la disposición de la familia, de la reacción y de esa filiación que el niño haya establecido de reconocimiento a la familia, el Defensor de Familia tomaría la decisión”, dijo Redondo.
Destacó que el derecho de un niño a tener una familia y no ser separado de ella es el principio fundamental del Icbf, y por ello propiciaron los encuentros entre Iris Guzmán y su nieto “desde la semana pasada, cuando nos entregaron el dictamen de Medicina Legal del resultado de la prueba de ADN (...) anteriormente se decía que ella era su abuela, pero nosotros no podíamos hacer los encuentros hasta que no tuviéramos el resultado”.
El Director regional del Icbf aseguró que pese a venir al mundo en circunstancias que a futuro podrían desencadenarle traumatismos, las condiciones están dadas para que el hijo menor de Zapateiro se reintegre al núcleo familiar.
“Parece que ya, a nivel familiar, hay una adecuada disposición anímica para recibir al niño (...) Esa era una lógica dentro del proceso. Lo demás implica un seguimiento, mirar cómo son los procesos de adaptación”, explicó Redondo.
Precisó que el sicólogo y el trabajador social del Instituto han trabajado con los familiares del menor de un mes de nacido en el manejo de la ansiedad.
“Ellos manejan ansiedad frente al niño, y eso no le es benéfico en esta etapa, sobre todo por los traumatismos que puede padecer. Ahora no los evidenciamos, pero hay que esperar (...) Con el primero que trabajamos fue con el hijo mayor (2 años de edad) de Kellys, porque andaba en una situación muy ansiosa por todo lo que está sucediendo”, afirmó Redondo.
Para acompañar a la familia de Zapateiro en el proceso, se hará el seguimiento post al reintegro del bebé. Este acompañamiento se realiza, generalmente, por unos seis meses.
“No es para ver si está bien o está mal el niño, es para observar cómo ha sido el proceso, si hay un tema de vulneración, obviamente este es un caso sui géneris dentro de los procesos administrativos de restablecimiento de derecho, porque hay un niño que fue sacado de un medio familiar por una cuestión que no fue ni de maltrato ni de abuso ni de nada que se le parezca (...) De principio el niño nació desarraigado de su medio familiar”, manifestó Redondo.
Agregó que lo más seguro es que en menos de un mes, el hijo de Kellys Zapateiro se le entregue a su abuela.
“De ahí en adelante él establecerá vínculos afectivos con ellos, eso no lo dudamos porque a la edad de él es muy fácil establecer esos vínculos muy rápido. Entre más rápido lo reintegremos a su familia, guardando el debido proceso, mejor; porque menos se le vulneraría el derecho al niño y más rápido él encontraría una identidad parento-filial y un espacio afectivo para su desarrollo”, sostuvo el funcionario.
¿Y SI EL EXPOLICÍA ES EL PADRE?
La Fiscalía General, representada por el fiscal primero especializado Pedro Díaz, quien lidera la investigación del atroz crimen, solicitó que al expolicía se le practiquen pruebas de ADN, con el fin de compararlas con las tomadas al hijo de Zapateiro y demostrar si es o no padre del menor.
El Director regional del Icbf aclaró que “eso no lo solicitamos nosotros dentro del proceso administrativo de restablecimiento de derecho, eso lo pidió el Fiscal dentro del proceso judicial que lleva”.
Aseveró que “lo que se busca aquí es que se valide el parentesco desde la vía matrilineal porque el padre no ha reclamado nada. Cosa diferente pasaría si el ADN sale positivo, ya que el padre puede reclamar la custodia del niño”. Lea aquí (Comprobarán si expolicía es o no el padre del hijo de Kellys)
De presentarse esta situación, “estaríamos frente a todo el pleito judicial que él tiene (la Fiscalía pedirá la pena máxima de 60 años de cárcel para el expolicía por los delitos de secuestro simple, desaparición forzada y homicidio agravado), y ¿sería un padre garante de derechos?”, cuestionó Redondo. Lea además (Asegurado expolicía Andrés Díaz por crimen de Kellys Zapateiro)
Advirtió que “si eso pasa y él llega a reclamar la custodia se detiene la entrega a la abuela, porque tengo que responderle al reclamo que haga y, en un proceso administrativo, los primeros que pueden reclamar la custodia de un niño son el padre o la madre. De ahí en adelante viene el primer grado de consanguinidad, segundo, tercero, hasta el sexto, que nos dice la ley podemos buscar para garantizar ese derecho al niño de tener una familia y no ser separado de ella”.
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