Los recursos que fueron donados por la Embajada de China tendrán como objetivo primordial incentivar la siembra de productos alimenticios y de comercio, como también el mejoramiento de infraestructura para una mejor calidad de vida de los retornados.
Así lo manifestó a El Universal Gabriel Vanegas, coordinador del Área de Acción Integral para el Desarrollo, al asegurar que lo que se pretende es garantizar el desarrollo en la región y que las poblaciones afectadas vuelvan a tener sus posibilidades de ingresos.
Además, se busca una sostenibilidad económica y social desde los territorios que una vez se vieron obligados a abandonar y a los cuales hoy han regresado.
Este proyecto está acompañado por la Agencia Presidencial para la Acción Social para que existan las garantías en el retorno, a fin de darle un impulso a esta región tan golpeada.
La infraestructura
Según Gabriel Vanegas, lo que se pretende con esta inversión tan grande es la recuperación de la vía de acceso, generación de proyectos de impulso para viviendas de interés social, recuperación del Centro de Salud en el corregimiento de Bajo Grande y la electrificación de las dos comunidades afectadas (Bajo Grande y Las Palmas).
Proyectos
Para una mejor calidad de los trabajos en estas poblaciones se implementará una serie de proyectos productivos que le garanticen a las asociaciones percibir los ingresos para el beneficio de los asociados.
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