Calamar, asfixiado por embargos

Más de una docena de embargos laborales con mandamientos de pago, que superan los $3.450 millones han aumentado la crisis económica del mu-nicipio de Calamar y, además, se afecta el desarrollo de proyectos de inversión. Los embargos, proferidos casi en su mayoría por los juzgados Primero y Segundo del Circuito de Turbaco obligan a la administración a cancelar acreencias laborales de empleados de administraciones anteriores. La alcaldesa de Calamar, Sara Villalba Molinares, dijo a El Universal que tiene las manos atadas porque todos los recursos están embargados. “Yo solicito al Ministerio de Hacienda, Contraloría, Procuraduría y demás organismos de control que pongan sus ojos en Calamar porque los embargos por obligaciones laborales no permiten que podamos usar los recursos de Calidad Educativa, Régimen Subsidiado y de otros sectores. Tenemos las manos atadas porque no podemos hacer caso omiso al mandamiento de los jueces”, dijo Villalba Molinares. Recalcó que los abogados del municipio han oficiado al Ministerio de Hacienda para que certifique que estos recursos son inembargables. “Además de los embargos laborales, también existen embargadas las cuentas de gastos de funcionamiento por alrededor de 1.000 millones de pesos”, dijo. Este medio conoció que en la lista de embargos aparecen Esteban Baltazar a quien le administración le debe cancelar $11 millones; a Rodolfo Vides y otros $26 millones; al ex alcalde Pedro Guerrero y otros $44 millones; Carmela Bermúdez y otros $1.340 millones en un proceso, y $643 millones en otro. Así mismo, a Isaías Simanca, le deben cancelar $124 millones en un proceso y $144 millones en otro proceso. Por último, a Rafael Lafaurie y otros les deben pagar $18 millones. Según la Alcaldesa de Calamar los recursos embargados en las cuentas de salud y educación, son inembargables. En el embargo de $643 millones, el Juzgado Primero del Circuito de Turbaco decretó el mandamiento de pago y secuestro de tercera parte de los dineros provenientes del Sistema General de Participaciones en la fuente. Según la Alcaldesa de Calamar, el municipio está paralizado. “Yo espero que nos certifiquen pronto que los dineros de salud y educación no pueden ser embargados para girar los recursos a su verdadero destino”, dijo. Recalcó que la mayoría de los embargos son laborales, por lo que el municipio está obligado a pagar exorbitantes sumas por los intereses de cesan-tías.