Empleados de la Alcaldía de El Carmen piden reintegro

El cumplimiento del fallo del juez Primero Promiscuo de El Carmen de Bolívar, Alí Silva Cantillo, que ordena arrestar por 20 días al alcalde, Galo Torres Serra o quien haga sus veces, por no acatar una tutela, aún no se ha cumplido. La medida del Juez está basada en una acción de tutela que interpusieron los empleados de la Alcaldía por haber sido retirados de sus cargos por el alcalde Torres Serra, pa-ra lo cual emitió el Decreto GTS 173 de diciembre 19 de 2009. Los empleados se encontraban amparados por la Ley de Garantías. Así lo explicaron los empleados que interpusieron la acción de tutela para que los reintegraran a sus trabajos, luego de que fueron sacados de la Alcaldía sin ninguna explicación. “Estamos esperando que el juez envié la or-den a la policía para que empiece a regir la detención del Alcalde”. Además, los empleados le manifestaron a El Universal que según las explicaciones de un funcionario del Juzgado, el documento en estos momentos se encuentra en el escri-torio de la Juez de Familia de esta municipalidad para el respectivo estudio, tal como lo exige la ley. Mientras todo se cumple, los trabajadores siguen es-perando en las instalaciones del Concejo de este muni-cipio el reintegro a sus labores. “Nosotros tenemos fa-milia y queremos trabajar porque fuimos retirados in-justamente”, dijo uno de los empleados. “Estudio el fallo” Por su parte, el alcalde encargado de El Carmen de Bolívar, Geovaldis González Jiménez, advirtió a este diario que se encuentra estudiando la orden del Juez con sus asesores para tomar la mejor decisión que no perju-dique a nadie. Las opiniones Por su parte, la decisión del juez de arrestar al alcalde de esta localidad por 20 días ha levantado todo tipo de reacciones entre los seguidores del mandatario y algu-nos detractores de la administración actual. Para Rafael Romero Díaz, vendedor ambulante, con la decisión del Juez se está demostrando nuevamente que el mandatario local está atropellando a todo el mun-do. “Para nadie es un secreto que aquí esta primando un problema de orgullo; en el cual solo los trabajadores son los perjudicados”, anotó el comerciante.