En El Guamo se quejan por la falta de autoridad

Algunos habitantes de El Guamo dicen estar aburridos de la situación de abandono gubernamental en que está sumido el municipio.
Varios de los moradores, quienes solicitaron la reserva de sus identidades, sostienen que el alcalde José Joaquín Miranda, va al municipio cada mes.
“Aquí hace falta autoridad. No tenemos atención hospitalaria, tampoco recibimos el servicio de agua potable. A esto se suma el pésimo estado de la vía de acceso hacia el Municipio”, dice un lugareño consultado por El Universal.
Reiteran que el Alcalde llega al municipio una vez al mes, por lo que desde hace algún tiempo lo apodaron como “la menstruación”.
No hay agua y salud
Según uno de los denunciantes, en lo corrido de esta administración no ha funcionado el servicio de agua potable en el municipio y a raíz de eso se han visto abocados a ingeniárselas para conseguir el líquido para el consumo y el uso doméstico.
“El agua se recibe un día al mes, cosa que nos tiene desesperados”, dicen moradores del municipio.  
Las cosas empeoran cuando se habla de la falta de atención hospitalaria, debido a que no hay insumos para atender a los pacientes.
“Todo medicamento que se necesite debe ser comprado por el paciente o su familia. También hay que rogarle a los médicos para que atiendan a los usuarios, ya que también les deben el pago de varios sueldos”, comentan los afectados.
Dicen que les toca comprar las jeringas, gasas y todo lo que se necesite para atender a un enfermo.
Adicional a los problemas con el agua y los servicios hospitalarios, la vía que une al El Guamo con la Troncal de Occidente está en pésimas condiciones.
Recuperan cementerio
Unos 100 habitantes de El Guamo, el domingo anterior, recuperaban a sus expensas el cementerio municipal, al cual podaban y limpiaban y le reconstruían un tramo de pared que se había caído.
Los voluntarios estaban trabajando y fueron interrumpidos repentinamente por el Secretario de Planeación y el inspector de Policía, quienes suspendieron los trabajos porque no tenían permiso para intervenir el camposanto.
La gente se molestó mucho porque la Administración “no lava ni presta la batea”, haciendo alusión a que no realizan obras ni dejan que la comunidad las haga.
La situación generó un cruce de palabras entre la comunidad y los funcionarios, y solo la Policía pudo conjurar lo se iba a convertir en una asonada.
Al final de cuentas, la pared fue levantada y el cementerio quedó limpiado en su totalidad.
Una semana antes la Administración, mediante una orden de servicio, había mandado a cercar el camposanto con alambres de púa y troncos de madera, los cuales fueron reemplazados por la pared que construyó la comunidad. El valor del contrato fue de $1.500.000.
Alcalde no aparece
El Universal tan pronto recibió esta serie de quejas por parte de la comunidad de El Guamo intentó ponerse en contacto con el alcalde José Joaquín Miranda para que diera su versión de los hechos denunciados, pero fue imposible localizarlo, ya que mantiene sus 4 teléfonos celulares en buzón.