"Nos tienen viviendo como animales"

Los problemas por la mala prestación de los servicios públicos colmaron la paciencia de los habitantes de los municipios de La Línea.
Fastidiados de vivir en la ignominia, centenares de personas bloquearon ayer La Cordialidad, corredor vial que comunica a Cartagena y Barranquilla, para manifestarse en contra de Giscol, Electricaribe e Invías.
“Nos tienen viviendo como animales. Nos toca tomar agua de caños, porque el acueducto no funciona. Además, en la noche nos toca dormir a la intemperie para evitar las altas temperaturas, pues el voltaje de la energía no es suficiente para poner a funcionar siquiera un ventilador”, expresó José Manuel Escorcia, habitante de Arenal.
Los manifestantes interrumpieron el paso vehicular desde la 8 de la mañana, para llamar la atención de la opinión pública y de las instituciones del Estado, frente a los males que los aquejan.
Escasez de agua, suministro deficiente de energía y vías deterioradas son los problemas comunes que afectan a los moradores de Santa Rosa de Lima, Villanueva, San Estanislao de Kostka (Arenal), Soplaviento y San Cristóbal.
La protesta, que empezó desde las 8 de la mañana y culminó después de la 4 de la tarde, fue pacífica. No hubo  necesidad de que las autoridades utilizaran la fuerza para conjurarla.
Agua
La comunidad protestó contra Giscol, compañía que tiene el contrato de operación y construcción del Acueducto Regional de La Línea, debido a sus constantes incumplimientos.
Según los quejosos, Giscol tiene 34 meses de retraso en la construcción del acueducto y de 46 meses en la operación.
La Contraloría General de la República encontró 15 irregularidades administrativas, con alcances fiscales y disciplinarios en el contrato suscrito entre Giscol y la Empresa Intermunicipal de Servicios Públicos Domiciliarios de La Línea.
Líderes comunitarios sostienen que entre enero del 2008 y mayo del 2012, la Alcaldía de Santa Rosa transfirió más de 2 mil millones de pesos a Giscol, para subsidiar el servicio de agua potable.
Consideran que dichos recursos deben ser devueltos, debido a que la empresa contratista no ha ofrecido un buen servicio.
Giscol reconoce que el sistema de bombeo no funciona bien, puesto que no recibe suficiente voltaje de energía. Para aliviar la escasez de agua, la compañía abastece a los pueblos con carrotanques, que no son suficientes para proveer del líquido a los más necesitados.
Energía
Los habitantes de La Línea culpan a Electricaribe y a la Gobernación de Bolívar de no haber puesto en funcionamiento la subestación eléctrica de San Estanislao de Kostka (Arenal), cuya inauguración fue anunciada hace 18 meses y se encamina a convertiste en un elefante blanco.
Para que la instalación eléctrica funcione, es necesario reconstruir 2 kilómetros de líneas entre Calamar y San Estanislao, que sucumbieron ante las emergencias invernales de 2010 y 2011.
Temilda Arroyo Zabala, dirigente cívica de Santa Rosa de Lima, expresó: “estamos cansados de tantos atropellos. Tanto Giscol como Electricaribe se culpan entre sí y no nos dan la cara”.
Carretera
Del Instituto Nacional de Vías (Invías), la comunidad reclama que termine la construcción de la carretera que comunica a Santa Rosa de Lima con Villanueva.
También pidieron que sea intervenido el trayecto entre Villanueva y San Estanislao de Kostka, que está a punto de colapsar por una enorme abertura.
Acuerdos
Una delegación de la Secretaría de Minas y Energía de la Gobernación de Bolívar se reunió con representantes de cada municipio para acordar soluciones tendientes a mejorar la prestación de los servicios públicos.
De la reunión trascendió que el Gobierno Departamental y Electricaribe están listos para iniciar la reconstrucción de la línea Calamar - San Estanislao, afectada durante la pasada emergencia invernal.
Las obras estarían culminadas en 66 días, aproximadamente. Así se pondría en funcionamiento la subestación eléctrica de San Estanislao y, en teoría, se acabarían los apagones y el acueducto funcionaría normalmente.
Opiniones
María Elena Cabrera, habitante de Santa Rosa.
“Nos tienen un solo vacile las empresas Giscol y Electricaribe, mientras que sus facturas sí son puntuales y exageradas.
Antonio Fernández Mármol, habitante de Arenal.
“En pleno siglo XXI los habitantes de los pueblos de La Línea recibimos servicios de mala calidad. Queremos soluciones”.
Luis Vega, habitante de Arenal.
“Estamos pagando servicios que no recibimos a satisfacción. Nadie nos presta atención y ya es hora que solucionen nuestras necesidades.
César Batista Hernández, habitante de Villanueva.
“Estamos así de mal por culpa de los alcaldes del período anterior, que no quieren soltar la teta de Giscol. Hagan algo por nosotros por favor.
Revisión a contrato
Salim Atencio, personero municipal de Santa Rosa de Lima, manifestó que la protesta de ayer reflejó la frustración de una comunidad que no recibe buenos servicios públicos.
“Giscol ha aplazado el progreso y el futuro del municipio”, afirmó el personero.
El representante del Ministerio Público solicitará la culminación del contrato a Giscol, aduciendo que los santarroseros no gozan del servicio de agua potable.
Habla alcalde
Rafael Gómez Carballo, mandatario municipal de Santa Rosa, dijo que la empresa Giscol ha incumplido los acuerdos suscritos con los alcaldes de los municipios de la Línea.
“La comunidad tomó las vías de hecho porque sus derechos han sido ignorados”, expresó Gómez.
“Resaltamos que  la protesta fue pacífica, pero no deja de preocuparnos que la mala prestación de los servicios públicos es un constante factor perturbador del orden público”, concluyó.