A Turbaco le fue bien en las pruebas del Icfes de 2009

Yeimi Doria Díaz, una joven pequeña, delgada, tímida, de ojos vivaces, negros, que acaba de cumplir 15 años y que en pocos días recibirá con ho-nores su grado de secundaria en la Institución Educativa Crisanto Luque de Turbaco, es una de las mejores bachilleres del país. La Institución Educativa Crisanto Luque y el Instituto Docente de Turbaco, colegios donde se imparte la educación pública, se ubicaron en la cate-goría superior del Icfes y varios de sus estudiantes ocupan los primeros puestos a nivel nacional. Este año Turbaco está por encima de Santa Rosa del Sur, único municipio de Bolívar, sin incluir a Cartagena, que tiene una institución educativa pública ubicada en el nivel superior, lo que para los directivos docentes y el alcalde, Miguel Arnedo Lozano, indica que no se está arando en el desier-to. De las demás instituciones educativas públicas de Turbaco, tres se ubicaron en el nivel bajo del Icfes, que son: Alfonso López Pumarejo, Cañaveral y Buena Esperanza; y dos en el nivel medio, que son: Felipe Santiago Escobar y Cuarta Poza de Manga. Los logros de Yeimi Según el Icfes, Yeimi, a secas, como le gusta que la llamen, obtuvo el puesto número 1, lo que indica que logró conseguir el puntaje máximo que puede alcanzar un estudiante en las pruebas de Estado en todo el país. Sus profesores reconocen que es una alumna modelo que participa en las clases e investiga. A ella no le cabe la felicidad en el pecho, pues sabe que con ese logro podrá competir por obtener una beca en la Universidad Tecnológica de Bolí-var para estudiar ingeniería industrial. Aunque se considera una joven normal, reconoce que le encanta leer libros de toda índole y aprender. Advierte que los programas de incentivos que implementa la Alcaldía de Turbaco, que consisten en entregar 2,5 salarios mínimos legales por semestre, la incentivaron a ser mejor. “Es que si uno es pobre y quiere salir adelante, debe tener claro que debe ser buen alumno”, señala la jovencita que reconoce que aún no se ha ena-morado, pues su meta es ser una profesional. Vive en el barrio San Pedro de Turbaco y tiene claro que sus padres deben trabajar duro para mantenerla a ella y a sus tres hermanos. “Yo me doy cuenta que para ser alguien en la vida hay que sacrificarse. Por eso, me dedico a estudiar. No uso la internet para hacer tareas, porque es muy fácil cortar y pegar. Mejor investigo en enciclopedias y hago resúmenes. Así aprendo más”, dice la jovencita. Otras buenas alumnas Como Yeimi, son varios los alumnos destacados del Instituto Docente, entre ellos: Yeikarina Coronel Rodríguez, una joven de 17 años, que obtuvo el 4 puesto en las pruebas de Estado, junto con otros estudiantes del país. “Yo siento la obligación de responderle a mi institución, a los docentes que dan todo para que obtengamos estos resultados”, dice. Esta joven iniciará sus estudios de ingeniería en la Universidad de Cartagena el próximo año. Así mismo, Aminta Espinoza Beleño del Instituto Docente de Turbaco, se ubicó en el puesto 7 a nivel nacional, lo que la ubica entre los mejores bachilleres del país. ¿Por qué la excelencia educativa? La razón por la que se da la excelencia educativa en Turbaco, según docentes y alumnos, se debe a los programas que se adelantan, gracias al apoyo de la administración municipal. “En el 2009 se invirtieron más de $2.000 millones en el mejoramiento de la infraestructura de algunas sedes educativas y otros recursos en adquisi-ción de sillas y equipos”, dijo el alcalde, Miguel Arnedo. “Para nosotros es un gran logro que dos instituciones públicas ocupen tan alto lugar, sobretodo porque le estamos apostando a la calidad educativa. Hoy por hoy, Turbaco se posiciona como el mejor municipio en calidad educativa, en lo que respecta a la parte pública”, dijo. “Nosotros seguiremos apoyando a la educación porque es un orgullo que turbaqueros de bajos recursos accedan a la educación superior por meritos. Por eso seguiremos incentivando todos los apoyos”, enfatizó Arnedo Lozano. Así mismo, la secretaría de Educación de Turbaco, Bertha del Río, dijo que los trabajos para alcanzar la calidad educativa se iniciaron hace seis años, en la administración de Silvio Carrasquilla y han continuado en el período de Miguel Arnedo. Hace seis años La funcionaria explicó que durante este tiempo se han capacitado a los docentes en los denominados ciclos de cualificación. “Los profesores son actualizados en diversas áreas, con el apoyo de la Universidad de Cartagena y la Universidad Tecnológica de Bolívar”, indicó. En Turbaco, explica, hay una red de directivos docentes, que es un órgano a través del cual se generan estrategias de mejoramiento de la gestión educativa al interior de las instituciones. Pero, además, explica Del Río que con el apoyo de los docentes Mónica Grondona Barrios, quien coordina el curso pre icfes; Lucy Pérez Vásquez, coordinadora Académica de la Institución Educativa Crisanto Luque y el docente Oscar Jaraba; además de Manuel Canoles y William Martínez del Instituto Docente, se desarrolla un ciclo de preparación a los alumnos de 10 y 11 grados que demora seis meses. “Los estudiantes de los últimos grados de secundaria deben acudir a la institución de lunes a sábado. No hay derecho a descanso, pues la idea es que se preparen bien para las pruebas de Estado”, dijo. Semillero “También destacamos el semillero de la excelencia, conformado por los mejores alumnos de todas las instituciones educativas públicas, quienes re-ciben reforzamiento en diversas áreas los fines de semana”, precisó. Bertha Del Río advierte que en Turbaco hay 17.000 alumnos en las instituciones públicas, de los cuales unos 150 integran el semillero de la exce-lencia. “Todos estos esfuerzos y el incentivo económico que entrega la administración a los 15 mejores bachilleres durante el tiempo que demore la carrera, que consiste en 5 salarios mínimos legales anuales, hacen que los alumnos se esfuercen por ser los mejores”, recalcó la funcionaria. Hablan rectores El rector de la Institución Educativa Crisanto Luque, Carlos Coronel, manifiesta que estos logros lo incentivan a seguir trabajando en equipo con los docentes. Así mismo, la rectora del Instituto Docente de Turbaco, María Urquijo, agradeció el apoyo de la administración de Turbaco para alcanzar la calidad educativa. “Nuestros maestros tienen ganas de trabajar y herramientas, lo que conduce a que exista el éxito que obtenemos”. Para el profesor Manuel Canoles, del Instituto Docente de Turbaco, además de las herramientas, es importante incentivar en los alumnos el deseo de superación.