El Parque Apolo, en El Cabrero, estuvo apadrinado durante tres años por la Universidad Rafael Núñez, a través de un convenio con el Distrito, que terminó en 2014.
A la fecha, el parque sigue sin padrino oficial y aunque de manera independiente ciertas entidades y miembros de la comunidad hacen algunos esfuerzos para mantener el emblemático espacio, se considera que aún hace falta mayor atención.
La inseguridad y la falta de mantenimiento permanente a la infraestructura y el arbolado, son las principales problemáticas que enfrenta el parque y que no deja de preocupar a los residentes de El Cabrero, según relatan.
José Guevara, líder de la comunidad, menciona que ante la situación que enfrenta el parque se busca reactivar Asocabrero, organización comunitaria que funcionó hasta hace varios años, para trabajar en favor del barrio y sus sitios de esparcimiento.
“Es necesario fortalecer la acción comunitaria. Acá existió Asocabrero, una asociación que libró muchas luchas importantes en la zona, pero se desintegró al dispersarse sus asociados. Ahora con los antiguos miembros y los residentes nuevos que quieran participar, vamos a reactivarla. Esta semana convocaremos para retomar la asociación y si se logra, podremos coordinar y canalizar a través de ella todos los proyectos y programas a favor del parque”, dijo Guevara.
¿Qué se hace y qué falta?
José Guevara explica que en lo que va del año la intención de algunos vecinos que se han preocupado por la preservación del parque ha sido vincular al mismo con entidades y proyectos, bajo el propósito de que se mantuviese con constantes actividades y por lo menos mejorara la percepción de seguridad en la zona. Hay que recordar que el parque no cuenta con vigilancia y ha sufrido varios hurtos a su infraestructura, así como ha servido de escenario para asaltos.
“Con la fundación Limpiarte en asocio con Pacaribe se han hecho jornadas de limpieza y también se pintaron unas rejas, y hay un proyecto para hacer yoga los domingos. Además estamos buscando vincular a algunas empresas privadas para hacer una huerta comunitaria en el parque”, destaca el residente.
Sumado a eso, hubo una articulación con Distriseguridad para crear el frente de seguridad de El Cabrero, además de que se instaló una cámara de videovigilancia en el parque.
Pero así mismo son varios los temas pendientes. “La Policía Cívica también está interesada en vincularse y en marzo hizo un requerimiento a la Secretaría del Interior para el uso de una caseta de Policía que está abandonada dentro del parque, pero no han obtenido respuesta. El EPA presentó en el parque el programa Hojas Verdes, del Plan 4C, y sembraron 30 árboles frutales con el compromiso de que habría mantenimiento semanal a los mismos, pero no han regresado a hacerlo”, indicó José Guevara.
El Concurso Nacional de Belleza realiza mantenimientos periódicos solo al mausoleo de Rafael Núñez y Soledad Román de Núñez, al interior de la ermita de El Cabrero, y al busto de Soledad Román, instalado en el parque. La comunidad también aguarda una inversión que habría prometido el Instituto de Patrimonio y Cultura de Cartagena (IPCC) para restaurar el teatrino del parque antes de que termine el año, sin embargo, hasta ayer en la tarde esa información no se confirmó oficialmente.
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