El alcantarillado y las mareas altas

Canales paralelas de sección rectangular, repletas de sedimentos, escombros, basuras y sin tapas en algunas partes; permiten en Castillogrande - por vasos comunicantes -, la salida de aguas lluvias a la Bahía o la entrada de las mismas. Ninguna entidad, al parecer, tiene que ver con su mantenimiento y esto lo ha convertido además en un natural criadero de mosquitos. La reforma a este diseño, deberá ser parte del proyectado estudio para proteger a la ciu-dad ante el incremento del nivel del mar, conjuntamente con la construcción de diques que minimicen el ingreso de aguas de la Bahía y la instalación de Check valves en las tuberías de descarga, que impidan el ingreso de las mismas. Ya algunos edificios recientemente construidos frente la Bahía, están proyectando salida alterna desde sus garajes a través del lado posterior, a la Avenida Piñango, para evitar charcos ahora casi permanente en la calle sexta, paralela al paseo peatonal, que durante todo el año pudre los vehículos y afea el ambiente. Gracias a nuestra Bahía y preciosas vistas, constructores y copropietarios han podi-do especular tan alto con los costos del M2 de las construcciones y propiedades en la zona y no entendemos entonces cómo puede haber tanta desidia de parte de todos, para materializar una solución urgente y siquiera parcial a este problema que cada año es mayor. Ricardo Torres Porto C.C No 19.228.645 de Bogotá Ingeniero Civil – Universidad Javeriana