Buzón


El caso de Piedad Córdoba

La ex senadora Piedad Córdoba debe aceptar con humildad el fallo de la Procuraduría General de la Nación y no asumirlo como algo personal. Quien la ha destituido es una institución y no la persona del Procurador Alejandro Ordóñez. Todos debemos acato y respeto por las instituciones y son las tres ramas del poder público las que más deben dar ejemplo. La Procuraduría tiene un material probatorio y ha hecho un proceso que la ex senadora puede impugnar sin necesidad de lanzar calificativos o generar dudas sobre la idoneidad, vida y obras del titular de esa corporación pública. Las curules del senado se hicieron para legislar en Colombia y no para hacer política y turismo internacional. Joaquín Marín Holguín C.C. 73.919.933 de Cartagena

Comentarios ()

 
  NOTICIAS RECOMENDADAS