El fiscal diferido

Hace un año renunció el Fiscal General de la República. Diligente, el Presidente de la República, doctor Álvaro Uribe Vélez, con su picardía, envió a la Corte Suprema de Justicia, su terna. La Corte al revisar el documento no la satisfizo y lo devolvió por inviable, pero el presidente insistió en que estaba ceñida a la Constitución. Uno de los ternados renunció y fue reemplazado, y no entiendo por qué la Corte lo aceptó como si él repotenciara la terna; lo mismo pasó con un segundo ternado que se retiró: la terna seguía viciada y nunca fue válida. Ha sufrido 21 debates y nada. ¿Qué hacer? Por venganza, orgullo o cooperación los ternados deberían renunciar. La Corte podría votar en blanco para que desaparezca la terna. Si la terna no es personal y la presentó el presidente Uribe, como acto de gobierno, el presidente Santos puede retirarla, como otro acto del nuevo gobierno, y presentar una terna adecuada y digna. Los abogados que figuraron en la terna anterior son honestos y capacitados pero no son los Juristas que exige la Fiscalía General de la República donde convergen negocios penales variopintos e intrincados. ARMANDO N LUJAN M. Pedagogo y Abogado® CC No 3.784.672 de Cartagena.