El barrio Crespo hace poco tiempo era el más tranquilo de Cartagena. Desafortu-nadamente, ya no es así. Entre otras “per-las”, tenemos terminales irregulares de bu-ses, negocios en lugares residenciales; y so-bretodo, y antes desconocida en el barrio, inseguridad. Los periódicos nos hablan de un sinfín de delitos contra la seguridad en el barrio. No hace mucho, madre e hijo fueron asesinados por un maleante. Hace apenas unos días, dos señoras fueron atra-cadas a plena luz en las inmediaciones del nuevo edificio de Comfenalco. Fulanos masturbándose por donde pasan señoras y niñas, etc. Si siguiera no me bastaría todo el “Buzón” para relatar cada fechoría. Y todo esto teniendo un CAI a 100 metros del ci-tado Comfenalco y las oficinas de la Fisca-lía en pleno. Hay mucho bandido suelto por Crespo. Le digo a las autoridades res-ponsables, imitando al antiguo vendedor de griegas: ¿es que no oyen el malestar de los residentes? ¿Es que no ven a tanto rufián suelto?
Fernando Sardó Pons
C.E. 269603
NOTICIAS RECOMENDADAS
Comentarios ()