En días pasados se originó un debate en el país sobre “La falta de infraestructura que tiene Colombia”.Muchos opinaron sobre el endeudamiento productivo y el endeudamiento improductivo. Por lo fácil de su enunciado, ustedes pueden definir cada uno de ellos. Fui crítico de los gobiernos anteriores por ese endeudamiento improductivo de sus obras como por ejemplo el Parque de la Comida Caribeña.
La tristeza es que hoy veo el mismo modelo de desarrollo despilfarrador y obsoleto.
Gastar 24.000 mil millones de pesos en el Centro y en sus plazas, como La Aduana, para cambiar unas estatuas, unos pisos y hacer unos parquesitos, es botar el dinero y no lo comparto.
¿Cuántas viviendas de interés social, puentes elevados, etc., podríamos construir con ese dinero? ¿acaso esa inversión es consecuente con los decretos de emergencia económica expedidos por el Gobierno Nacional?
Les dejo la duda y los invito a que reflexionemos sobre esa cultura del despilfarro en una ciudad como Cartagena. De seguir con esa política, propongo que enchapen las murallas y el Castillo San Felipe con porcelanato veneciano.
RAMÓN MOLARES VARGAS
C.C. 73.118.727 de Cartagena.
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