Es a todas luces increíble que algunos estudiantes de las universidades públicas no sepan debatir civilizadamente. No me imagino a ningún Padre de familia dar el visto bueno a sus hijos para que armen semejantes zafarranchos en las sedes de las universidades públicas.
Lo visto por televisión, en el caso de la Universidad Distrital de Bogotá, no tiene perdón de Dios. Es ver a los estudiantes acabar con las instalaciones; como no tiene presentación los hechos de desorden en las instalaciones de la universidad nacional.
Como es ¿? eso que los Dirigentes estudiantiles no sepan debatir con cordura y lucidez los problemas e inconvenientes que se generan por decisiones o proyectos de ley.
Lo que sí es claro es que El Estado debe financiar las universidades públicas para que así puedan ingresar a sus claustros muchos hijos de las clases de estratos socioeconómicos bajos.
El Estado tiene que favorecer la movilidad social, fomentando los espacios de los estudios superiores para muchos seres humanos de Colombia que lo tienen como objetivo en su plan de Vida.
También es claro que los Estudiantes deben ser respetuosos del art. 95 Constitucional. La violencia como la toma a la fuerza de las instalaciones no es lo correcto. El discurso no se puede confundir con desorden y Pandemonium.
Colombia no es ninguna republiqueta de medio pelo para que la maltratemos con insanía. Nuestro Derecho a protestar debe estar enmarcado en lineamiento del verbo, nunca teniendo como base la violencia. la irracionalidad.
ROGELIO VALLEJO OBANDO
Economista Universidad Externado de Colombia T.P. 1755
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