A medida que se acerca el final de su mandato, los cartageneros asistimos a una curiosa, pero muy preocupante, metamorfosis de la Mariamulata. Cada día que pasa se parece más a los buitres políticos de siempre. Ya no tiene recato en insultar la inteligencia del pueblo que la eligió, como cuando afirma que el Transcaribe no está atrasado. Que, por el contrario, ya lleva el 88%, como si ese porcentaje de avance fuera de veras un motivo para felicitarla. Es increíble que se atreva siquiera a decirlo, cuando resulta evidente que en sus distintos tramos el avance es mínimo o no lo hay. En El Amparo, por ejemplo, hace meses que no se hace ningún trabajo y la obra está a medio hacer. Igual pasa con el famoso puente de Las Gaviotas, que también lleva meses en reparación. El sinsabor es peor cuando comparamos el proyecto con sus pares de otras ciudades que como Bucaramanga, empezaron prácticamente al tiempo, pero allá funciona completamente, y con trayectos mucho más extensos en kilómetros. Y no hablemos de otras obras como la carretera del Bosque, que no tiene andenes, ni accesos peatonales, ni obras de jardines como en toda ciudad decente, pero según el Gobierno ya está lista. Trate un discapacitado de subir su silla de ruedas a los puentes peatonales a ver si de verdad puede. Ahora sale la alcaldesa con que el lugar actual de Bazurto es el ideal para la plaza de mercado, que lo que le falta es una buena limpieza, pero que no se debe trasladar de allí porque es el sitio más cómodo. Cómo se nota que ya empezaron a afinar la maquinaria para las próximas elecciones y a anestesiar al pueblo con dosis de narcótico como esa, al tiempo que recaudan la valorización para financiar las próximas elecciones. Sucederá lo que ha pasado con tantas otras obras anteriores, en las que se robaron el presupuesto y finalmente no hicieron algo. ¿Recuerdan los paraderos? Alcaldesa, no subestime tanto a quienes la eligieron, por favor.
José del Carmen Montero
C.C.No. 73.236.335 de Mompox
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