Un ciudadano que aspire a un cargo de elección popular debería tener claro en el escenario en qué se encontrará, de ser electo por el voto popular. Algunos candidatos están ofreciendo lo divino y lo humano. Señores, los recursos públicos son escasos. Por ello, los candidatos deben ser más mesurados en sus promesas, y la herramienta es el marco fiscal de mediano plazo que le dicen al día de hoy en dónde están comprometidos los recursos. Hablar de pavimentar todas las calles o de colocar un policía en cada esquina son propuestas que rayan en el populismo. Desde ahora les digo a los candidatos y a los ciudadanos elegir a uno u otro es indiferente. Existe un marco constitucional que por mucha legitimidad que tenga un alcalde no puede salirse de ahí. El próximo alcalde deberá cobrar la contribución de Valorización por beneficio general, aunque hoy como candidato prometa que no lo va hacer; y si es caso deberá cobrar otras contribuciones, porque la única forma de invertir socialmente en la ciudad es a través de recursos frescos, y esos solo se consiguen con cooperación internacional o tocándole el bolsillo a los conciudadanos. Si queremos una ciudad próspera, debemos invertir en ella; y la primera inversión es aportarle a un candidato que se dé la pela por los menos favorecidos.
Uriel Gustavo Aguilar Alvarez
C.C.No.73.094.967 de Cartagena.
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