La elección popular de alcaldes acabó con la dedocracia en Cartagena, dejándole la responsabilidad de elección a la ciudadanía, que le ha dado el mandato a representantes de diferentes sectores políticos y gremiales que han conducido esta capital con grandes altibajos por la falta de continuidad en los programas de gobierno. Sin embargo, la alcaldesa Judith Pinedo, viene haciendo una labor meritoria en materia de educación y erradicación de la pobreza. Ante las nuevas elecciones para elegir alcalde, los cartageneros tenemos la oportunidad de cambiar la histórica exclusión de los negros en el gobierno de Cartagena, votando por un personaje que se ha ganado el favor popular por su trayectoria de servicio a la comunidad, requisito indispensables para ser buen gobernante. El gobierno de un afrodescendiente deberá trabajar por todos los cartageneros, con un gabinete de representación multiétnica, no por apellidos, ni recomendaciones personales, sino por sus méritos profesionales y morales. Pedro Romero y el Almirante José Prudencio Padilla jamás se imaginaron que tenían que pasar exactamente 200 años para que un descendiente de esos esclavos que ellos quisieron libertar, tuviese la posibilidad de presidir el gobierno de Cartagena, puerto negrero, donde estas personas víctimas del secuestro de su tierra fueron objeto de toda clase de tratos abominables.
Bernardo Romero Parra
C.C.No. 73.094.836 de Cartagena.
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