El sitio es reconocido. Dicen que constantemente salen e ingresan mujeres de noche o de madrugada en buses. A veces visten shorts, blusas con escotes en el busto o en la espalda; a veces se besaban en la mitad de la calle y se veían desorientadas. En la vía varios hablan de la Casa Benjamin y murmuran: ¿Qué pasa ahí? No hay lujos, son cuartos con camas y baños, algo normal.
“Atrás de la casa amanecían hasta las 6 de la mañana, las mujeres desnudas y se ve mucha droga, prostitución y alcohol. Este prostíbulo, podríamos llamarlo así, funciona hace más de 10 años, pero hace unos cuatro se ha descarado. Las trabajadoras del sexo salían casi desnudas, muchos niños cuando veían a prostitutas besándose les preguntaban a sus padres por qué lo hacían. Como residentes también nos cansamos de ver este espectáculo. El sábado lo cerraron, pero al día siguiente siguió funcionando como si nada”, comenta un residente del sector.
Ayer, a las 9:30 de la mañana, un hombre se bajó de una camioneta, tocó la puerta de Casa Benjamin pero nadie le abrió. En el portón hay un cartel que dice ‘sellado’, pero lo omite y revisa por una pequeña ventana si alguien le responde, arriba se ven unas sábanas colgadas. Quizá hay alguien. Pasan varios minutos y se cansa de esperar, se sube en la camioneta y se va. A los 10 minutos aproximadamente se acercan varias camionetas, van marcadas con el logo del CTI de la Fiscalía, más atrás patrullas de la Dijín de la Policía, fiscales y representantes de la Procuraduría General de la Nación. Intentan abrir, revisan el portón pero se ven obligados a forzar la cerradura.
Enfrente, trabajadores de operadores turísticos observan el procedimiento y comienzan a susurrar.
Los funcionarios ingresan e inician la diligencia de extinción de dominio de este inmueble, usado presuntamente para cometer delitos sexuales en la ciudad. Es de propiedad del israelí Benjamin Mosh, hermano de Assi Mosh, a quien le solicitaron circular azul de la Interpol.
Después sale una mujer, apresurada y con cara de angustia, se sube a un taxi. Regresa nuevamente, ingresa y sale con tres mujeres más, también preocupadas.
Al tiempo que realizan el operativo en El Laguito, otros integrantes de las autoridades hacían el mismo procedimiento de extinción de dominio a un inmueble en la carrera 3 # 7-62 en Bocagrande.
En esta casa se presume que, luego de las grandes fiestas que terminaban en orgías y que involucraban drogas en la Casa Benjamin, quienes participaban llegaban a dormir.
Por qué la diligencia
Se investiga si hay relación entre la red que trabajaba en el hostal y las mujeres que, al parecer, participan de prácticas ilícitas en la ciudad. Ellas eran evacuadas en buses en la noche y los vecinos se daban cuenta. No se descarta que menores estuvieran involucradas.
“El fin de semana se hicieron distintos operativos en los que hay que destacar que algunos guardan relación entre sí y otros no. Este es un caso particular de lo que significa la venta ilegal de estupefacientes en este hostal, la participación eventual de estas personas en orgías y fiestas que podrían tener repercusiones criminales en la medida que podrían constituir un delito, y lo que significa también para las incautaciones y elementos hallados en el inmueble”, explicó Mario Gómez, fiscal delegado para la violencia contra niños y niñas.
Esta diligencia hace parte de los trámites para la extinción del derecho de dominio, pues los inmuebles que han sido usados para la comisión de ilícitos y delitos, pueden ser objetos de esta medida.
La Fiscalía pudo establecer que había droga, y que eventualmente se estaría vendiendo a algunos clientes que trabajan con el hostal y a una red que está en El Laguito, donde se investiga también si habría relaciones sexuales ilícitas.
Además de extranjeros, también trabajarían colombianos para la venta ilegal de estupefacientes y comercio sexual de mujeres.
“El Estado inicia los procesos administrativos, pasa a la Sociedad de Activos Especiales y se establecen los montos eventuales de reparación y que se puedan destinar estos inmuebles en función de las víctimas”, puntualizó el fiscal delegado.
La operación
Recordemos que el domingo, la Fiscalía anunció la captura de 18 cabecillas de redes presuntamente vinculadas al proxenetismo en la ciudad. Dentro de esta línea investigativa, donde está Casa Benjamin, capturaron a seis personas entre las que están dos israelíes, un venezolano y tres colombianos. Esta consiste en que los extranjeros organizan eventos sexuales masivos con niñas y adolescentes.
Estas investigaciones se extienden a otros destinos turísticos como Santa Marta, donde hay otras propiedades.
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