En la tarde de ayer poco había cambiado el panorama de las ventas ambulantes en la avenida Venezuela y en algunas calles del Centro Histórico, en comparación con las imágenes difundidas por este medio el pasado lunes. Sin embargo, en algunas plazas de la ciudad el ambiente no era el habitual. Lea aquí (Ventas ambulantes en el Centro Histórico, ¿sin Dios ni ley?)
Es que los frentes de las plazas de Santa Teresa, San Diego y Santo Domingo lucían con muy pocas ventas ambulantes, y según la Policía que custodiaba la zona, los únicos presentes eran los vendedores que tenían confianza legítima.
La Gerencia de Espacio Público y Movilidad informó que la recuperación de esos puntos se está logrando gracias al trabajo de 80 brigadistas, quienes de 9 a. m. a 11 p. m. los inspeccionan y solo dejan trabajando a los que tienen confianza legítima.
Un censo realizado por esa dependencia Distrital el año anterior determinó que en el Centro Histórico hay 1691 vendedores informales, de los cuales aproximadamente 600 tienen dicha confianza.
No obstante, en temporadas turísticas como Semana Santa proliferan muchos más, y por ello se ha hecho necesario un mayor control de la autoridad competente.
(Lea aquí: “Operativos de control en el Centro se mantendrán después de Semana Santa”)
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