Con trabajo empezó a pagar Edward Lozano, “el Chino”, el asesinato de su mascota el 25 de noviembre pasado en el barrio Olaya Herrera.
El hombre, oriundo de San Andrés, tendrá que cumplir con 404 horas de servicio social, por lo que desde ayer empezó a trabajar en el mantenimiento del Parque del Centenario.
De 8 de la mañana a 12 del día, “el Chino” se dedica a limpiar el parque, a barrer los senderos y a limpiar la fuente, además tiene como misión avisar y denunciar si ve a alguien maltratando a un animal. Adicionalmente, lleva una camiseta que le recuerda a él y a quienes lo ven, que debe cumplir con la Ley 84 de 1989 que protege a los animales.
Edward trabaja como vendedor ambulante durante las noches en el sector de la Bomba El Amparo, pero ahora deberá alternar este oficio con el de mantener el Parque del Centenario como una tacita de plata hasta que cumpla las 404 horas.
Sobre el asesinato de “La Perris”, Edward dice que lo hizo porque estaba ebrio. Asegura, que el dueño de la pieza donde vive le reclamaba diariamente por las travesuras de la perrita y ese día lo hizo enfurecer y quien pagó por la rabia fue su mascota.
“El Chino” dice estar arrepentido pues a la perra la crió desde pequeña y la tenía hace más de un año. Confiesa que fue un error haberla matado y asegura que solo se dejó llevar por la rabia.
La denuncia
La sanción que cumple “el Chino” fue impuesta por la Inspección de Policía. No. 5 del barrio Chiquinquirá en la Localidad 2.
La brutal muerte del animal fue denunciado ante la inspección por el concejal Germán Zapata, quien insiste en que estos actos de maltrato y crueldad animal deben ser denunciados, conforme a lo establecido en la Ley 84 de 1989.
Es importante que uno en la vida aprenda de los errores. Que eso que hizo ‘el Chino’ le sirva de escarmiento”.
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