En vez de asistir a sus clases, como todo niño de su edad, Valeria Sofía Barón Angulo debe permanecer en casa debido a la sintomatología propia de la enfermedad que padece.
Nauseas, depresión, ansiedad y dolores en las piernas, entre otras molestias, abruman no solo a la pequeña sino, como es obvio, a sus padres, quienes se encuentran desesperados y decidieron denunciar las irregularidades que se presentan en la entidad de salud a la que se encuentran afiliados.
Cuenta Kelly Angulo, madre de la menor, que ya han hecho todo lo que está al alcance de sus manos por llevar a cabo el tratamiento médico de su hija, pero necesitan que Comfacor cumpla con sus deberes para que a Valeria se le garantice el acceso a los especialistas capacitados que puedan manejar su caso.
El hipertiroidismo se produce cuando “la glándula tiroides produce demasiada hormona tiroidea en un corto período de tiempo, lo que tiene como consecuencia la aceleración de la actividad metabólica del organismo.
“En noviembre nos dieron una orden para que la niña recibiera yodo radioactivo y por la demora que de Mundo Medinorte (IPS) en darnos la cita, Sofía se volvió hipotiroidea (disminución global de la actividad orgánica que afecta a funciones metabólicas, neuronales, cardiocirculatorias, digestivas, etc); entonces le dieron cita con nucleologo en febrero, mientras tanto la niña presentaba cada vez más y peores síntomas”, explica Kelly.
A estas alturas los padres de Valeria siguen esperando a que Comfacor autorice la “yodoterapia”, pero la EPS no da respuesta, a pesar de que la niña ha tenido dos recaídas debido que su edocrinólogo pediatra, convencido de que le harían el tratamiento de forma oportuna, redujo las dosis de los medicamentos, lo que acrecentó la sintomatología por la tardanza.
Comfacor responde
Tras conocer la denuncia que los padres de Valeria Sofía hacen contra Comfacor EPS, El Universal se comunicó con el Departamento Administrativo de Salud Distrital (Dadis), donde nos informaron que ya tienen conocimiento de este caso y junto con la Secretaría de Salud Departamental (por estar afiliada en Turbaco), se está averiguando por qué la menor no ha recibido la atención que necesita.
Por otra parte, Jennifer Sánchez, funcionaria de Comfacor tomó los datos de la afiliada y después de revisar en la base de datos nos indicó que la demora en las órdenes se debió a que el caso de la niña, de 8 años, se encontraba en junta médica y que el día de ayer en horas de la tarde se habían remitido a Estrios (IPS) las ordenes necesarias para que la IPS programe “lo antes posible” la yodoterapia que la paciente necesita.
De igual manera las irregularidades reflejadas en la falta de atención a una niña que requiere atención prioritaria serán investigadas por la unidad de Aseguramiento y Prestación de Servicios de la Sanidad de Bolívar.
Saludcoop y Nueva EPS tampoco cumplen
Libis Puerta, denunció ayer que a pesar de haber ganado una tutela que favorece a su padre con el reemplazo del marcapasos que tiene implantado, la Nueva Eps lleva meses incumpliendo dicho fallo.
“La Nueva Eps ha hecho caso omiso y no autoriza el cambio del marcapasos de mi padre. La respuesta que nos dan es que van a mandarlo para Barranquilla, sin tener en cuenta de nosotros vivimos en Turbaco y se trata de un hombre de 76 años que no está para hacer esos viajes”, alega la hija del señor Germán Puerta Guardo.
Sumada a otras quejas en el mismo sentido, Libis denunció también, que comunicarse con la Clínica General del Norte, IPS con la que la Nueva Eps tiene contrato desde hace varios meses en Cartagena, es prácticamente imposible.
“Cuando uno necesita hacer una cita no hay manera de comunicarse por teléfono y si de casualidad responden, después de un momento le cuelgan a uno el teléfono, de esa manera tanto la clínica como la EPS viola los derechos de sus usuarios y en especial los de mi padre que tiene una situación de salud muy delicada”, insiste Libis.
El Universal trató de comunicarse con la centra del Citas de la Clínica General del Norte para comprobar la denuncia de Libis pero no hubo quien contestara el número de contacto (6535120).
No había contrato
Según la Nueva Eps, en Cartagena no tenían contrato con la especialidad que necesita el señor Germán Puerta, pero “gracias a la denuncia” eso se corregirá para que en las próximas semanas el paciente pueda someterse a la cirugía que necesita.
“Lo que no hizo el cáncer lo va a hacer Saludcoop”
“Lo más frustrante de pertenecer a esta EPS es que, aparte de que no cumple con la atención que requieren sus pacientes, no existe un trato humano, no hay nadie que ponga la cara cuando sus pacientes solicitan una respuesta”, indica Lorena Pulgar Arrieta, q uien desde hace tres años pelea contra el cáncer de mama.
La mujer de 41 años, afiliada a Saludcoop fue diagnosticada con la enfermedad en el 2011 y desde entonces lucha con los tratamientos que sus especisliatas le han recomendado con el fin de que el cáncer no vuelva a aparecer.
“No me mató la enfermedad y me va a matar la EPS. Desde hace meses estoy gestionando las poliquimioterapias que necesito y me dan la cita pero no autorizan el medicamento, no es absurdo eso”, alega Pulgar Arrieta.
Tres procedimientos tiene pendientesLorena, quien asegura que le preocupa enormemente el deterioro que ha tenido su salud de un tiempo para acá como consecuencia de la demora en la que ha incurrido Saludcoop.
“Mi oncólogo llamó directamente a Álvaro González, director regional de Saludcoop, y la respuesta que ese señor le dio es que si yo tenía que entutelar que entutelara porque él no podía hacer nada para solucionar mi caso”, contó indignada Lorena frente a la respuesta del funcionario, con el que El Universal ha tratado de comunicarse en varias oportunidades, pero no ha sido posible obtener una respuesta de su parte.
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