“Hola tía, soy su sobrino el que vive en Venezuela. La Guardia me paró en la frontera y me quiere detener por contrabando. Tengo todos mis papeles en regla, pero dicen que no me van a dejar pasar por ser colombiano. Me piden un millón de pesos para soltarme. Por favor présteme ese dinero que apenas regrese a Caracas hablo con mi mamá para que se lo devuelva. No la llamo a ella para no preocuparla, usted sabe como se pone con estas noticias”.
¿Le suena conocida la historia? Llamadas como esta son las que han recibido miles de colombianos víctimas de estafa en los últimos meses, y aunque no existe un secreto para evitar ser contactado por un delincuente, sí hay varias estrategias que le hacen más difícil el trabajo de quedarse con su dinero; la más importante, denunciar cualquier llamada sospechosa.
Según dio a conocer el Gaula de la Policía a El Universal, el 75% de las personas dedicadas a este tipo de delitos en Colombia están recluidas en los centros carcelarios del país, y aunque en sus llamadas aseguran hacer parte de alguna banda delincuencial, la mayoría no tiene más armas que un celular, un plan bien elaborado y el miedo que pueda generar a sus víctimas gracias a la información que previamente consiguió en redes sociales, tarjetas de presentación o con cómplices.
“El peor enemigo de una persona que es víctima de extorsión o estafa es el miedo a denunciar. Pero más allá de eso, es importante no ponérsela fácil al delincuente, y eso se logra teniendo un cuidado especial con la información que compartimos en Internet o por teléfono cuando recibimos una llamada. Por más increíbles que parezcan las historias que se inventan los delincuentes para sacarnos dinero, siempre hay alguien que cae. En la mayoría de los casos son personas presas que llaman desde una cárcel y tienen a alguien afuera para que reclame el dinero, a veces, ni siquiera esa persona sabe que está reclamando el cobro de una extorsión”, señaló la Policía Metropolitana de Cartagena, en cabeza del coronel Carlos Rodríguez Cortes, que la semana pasada lanzó el ‘Plan de choque contra la extorsión’ con el que se ejecutarán 118 operaciones de alto impacto que atacarán a las organizaciones dedicadas a este delito.
¿CÓMO CONSIGUEN NUESTRA INFORMACIÓN?
“Señor Camilo Valderrama*, habla con ‘el Mono’, comandante del bloque Caribe de Los Urabeños. Lo llamamos para que nos colabore con 5 millones de pesos. Sabemos que es dueño de un restaurante en el Centro donde trabajan 15 personas. Trabaja en Petróleos Colombia de 8 de la mañana a 6 de la tarde, gana 3 millones de pesos y acaba de volver de un viaje a Panamá junto con su esposa Carolina y sus dos hijos Camilo y Daniel. Si no quiere que les pase algo, ya sabe, 5 millones de pesos”.
Son varias las estrategias que emplean los extorsionistas para conocer nuestra información y utilizarla para sus amenazas. Una previa llamada supuestamente equivocada y la respuesta confiada de la víctima, sirve para que obtengan nombres y ubicación; con una llamada en la que ofrecen un servicio o simulan un concurso logran saber el lugar de trabajo, puesto y sueldo. Ya con esta información, solo hace falta que ingresen a redes sociales como Facebook para saber las actividades cotidianas, los viajes realizados y conseguir fotos del núcleo familiar que son empleadas en la intimidación.
Como medida preventiva, aunque no garantiza quedar blindado de este tipo de extorsiones, las autoridades recomiendan mantener el perfil de las redes sociales como ‘privado’ para que solo pueda ser vista por amigos cercanos y familiares, y evitar publicar en Internet cualquier información que les permita a los delincuentes conocer dónde está, la dirección de la residencia, el número telefónico, la identidad de los hijos, sitio de trabajo o datos financieros.
DENUNCIAR SÍ PAGA
Salomón Buitrago*, dueño de un almacén en el Mercado de Bazurto, solía pagarle más de 5 millones de pesos al mes a una banda extorsiva que azotaba a los comerciantes del sector. Cansado de la extorsión, un día dejó el miedo a un lado y denunció este hecho ante la Policía. Hace 3 años no paga un solo peso a los delincuentes.
“El Mercado de Bazurto es un sector que nos enorgullece porque el 95% de los comerciantes eran extorsionados en el 2012, y gracias a nuestro trabajo y las denuncias, podemos decir que este delito se erradicó casi por completo. La Policía no puede lograr esto sola, necesita que las víctimas hablen para que podamos actuar”, señaló un oficial del Gaula, quien recordó que la línea de atención contra la extorsión es la 165.
Según datos entregados por la Policía, 117 cartageneros denunciaron ser víctimas de extorsión durante el 2014; en lo que va del 2015, lo han hecho 32 personas.
* Nombres cambiados por seguridad.
CÓMO RESPONDER AL TELÉFONO PARA NO DAR INFORMACIÓN
- A la pregunta ¿Con quién hablo? Responder ¿A quién necesita?
- A la pregunta ¿De dónde me contestan? Responder ¿A dónde llamó?
- Lo tenemos vigilado. Responder ¿Qué tengo puesto?
- Papá estoy secuestrado. Responder ¿Cuál es el nombre de tus abuelos?
- Hola tío. Responder ¿Cual es el nombre completo de mi hermano?
- Lo llamo para actualizar sus datos. Responder “No. mejor voy hasta la oficina”.
- Usted es el feliz ganador de... Responder “Esta semana paso hasta la oficina y lo reclamo”.
LO QUE SE DEBE HACER AL RECIBIR UNA LLAMADA EXTORSIVA
1. En lo posible, grabe la llamada.
2. Identifique el número telefónico desde donde lo llamaron.
3. No entre en confrontación con su interlocutor.
4. Despeje interrogantes básicos. ¿Quién? ¿Por qué?
5. Absténgase de entregar información personal que pueda ser empleada en su contra.
6. No se comprometa a pagar o a aceptar exigencias, pero muéstrese dispuesto a negociar para ganar tiempo.
7. No cuelgue la llamada ni desactive la línea telefónica.
8. Evite hacer verificaciones sin ayuda profesional.
9. Mantenga la reserva de su entorno familiar y laboral.
10. Denuncie inmediatamente ante el Gaula de la Policía Nacional a través de la línea 165.
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