Abdu Eljaiek, el lente artístico

Un solo retrato de Abdu Eljaiek habla por la eternidad de un rostro. Basta que uno mire cualquiera de las fotografías que ha captado de los personajes de Cartagena de Indias, para conocer un poco del secreto que guardan los ojos. Por ejemplo, en el rostro de Donaldo Bossa Herazo se abren puertas y ventanas de la ciudad, él que fue un guardián de la memoria, su rostro es algo más que un retrato de un historiador. Enrique Grau es el mismo y el de siempre. Juega todo el tiempo y su obsesión es Cartagena en cualquier edad, en sus carnavales, en su esplendor y en su pesadumbre. Alejandro Obregón está pintando en todo momento, sus manos tienen la manía de hacer pinceladas mientras habla,  y parece estar recordando en todo momento el color que acaba de pasar por el cielo, la estela de luz que se desvanece, el azul de los cangrejos y la tenaza que queda en vilo al mediodía. Rogelio Salmona lleva como el caracol la casa a cuestas. No necesita decirlo pero en su rostro están sus propias construcciones. No es como la gente dice fácilmente. Quedó listo para la foto. En el caso de Abdu Eljaiek, quien es retratado por él queda eternizado en lo que es por fuera y por dentro. Esa capacidad de ver el abismo de cada uno sin  dejar de ver el mascarón de proa de nuestra alma, es una de las virtudes de este artista de la fotografía. Tan cerca de nosotros y tan distante del conocimiento de las nuevas generaciones.
La obra de Adbu puede verse en diversos libros de historiadores, arquitectos y escritores.  En 1966 en el libro “Colombia”,  de Reichel Dolmatoff. En 1975 en “Los intocable”, de Fausto Panesso. En  1971 en el libro de memorias “Yo el Alcalde”, de Eduardo Caballero Calderón. En 1972 en el libro “Herencia Colonial”, de Caicedo Ayerbe. En 1977 en el libro “Villa de Leyva”, con textos de Jorge Alejandro Medellín, editado por el Ministerio de Cultura. En 1977 “Permitido en Colombia”, con textos de Eduardo Mendoza Varela. En 1997 publicó “El Corazón de Oro”, Clínica Shaio, Fernando Garavito  – 1997 – “Historia de la luz”, Telecom 40 Años, Fernando Garavito –1997 –. En 1982 “Canal del Dique”, de Eduardo Lemaitre.
Los retratos de Abdu Eljaiek hablan por sí mismos. Y uno puede escuchar la conversación o el susurro cifrado que hay en cada una de sus fotos. Lo conmovedor de todo es que los rostros captados en cualquier edad, reflejan el carácter y la personalidad de cada uno de ellos.
Abdu es de Calamar pero pudo haber nacido en Grecia. Ha registrado tantos rostros e instantes de Cartagena, y es como si se hubiera quedado para siempre entre nosotros.

Un artista excepcional


Abdu Eljaiek ha expuesto su obra en Francia, Polonia, Bélgica, Yugoslavia, Colombia.
Su obra fotográfica figura en la Enciclopedia Internacional de fotógrafos desde 1839 a nuestros días. Edición Cámara Oscura, Hermance, Suiza y casa europea de la foto, París, Francia (1992)
Ganó el Primer premio color, segundo Salón de Arte (1967).
Primer premio color, Salón Nacional de Arte Fotográfico (1972).
Condecoración al mérito artístico, Instituto Distrital de Cultura y Turismo (1981).
Primer premio, sexto concurso fotográfico zoológico Santa Fe de Medellín.
Invitación del departamento de estado de los Estados Unidos de América, para reportaje de parques nacionales y seminario con Ansel Adams (1974).
Cinco becas otorgadas por la Federación Nacional de cafeteros para trabajos artísticos y exposiciones fotográficas en Europa (1984/1997).