Edwin Aguilar llegó marcando goles

Edwin Aguilar debutó marcando goles con el Real Cartagena, equipo que vapuleó 4-2 a Junior en Magangué, en el inicio de la Liga Postobón I.
El panameño vino como refuerzo y marcó diferencia desde el primer juego. Esto hizo que de entrada comenzara a ganarse un espacio en el corazón de la hinchada.
El primer gol, hermoso por donde se le mire,  fue a los 11 minutos. “Jamerson Rentería me cedió el balón  claro, pero  la bola me hizo un mal bote y decidí enganchar al contrario para rematar fuerte con izquierda”, dijo Edwin Aguilar sobre su primer tanto en el 2011 en el balompié colombiano.
El segundo gol fue a los 20, también en el primer tiempo. Rentería remató a un costado, Viera contuvo a medias y Aguilar apareció de manera oportuna, como suelen hacerlo los goleadores, para mandar el balón a la red.
“Todo delantero quiere debutar con gol y más en un clásico. Los goles me dan confianza, ya puse un pico alto entre los aficionados y ahora la exigencia será mayor. Estoy preparado para el reto, desde que llegué dije que vine a marcar goles”, aseguró Edwin Aguilar ayer después de una sesión de entrenamiento en la Base Naval.
Además de los goles, al panameño se le observaron buenos movimientos en el campo de juego, gran capacidad técnica, juego colectivo y cuota de sacrificio al momento de recuperar el balón.
“Me entendí bien con Jamerson Rentería, ya habíamos hecho un buen juego ante Cúcuta, en un amistoso. Hay que seguir trabajando duro para conseguir grandes cosas. Tenemos buen equipo”, agregó.
Los goles de Edwin Aguilar le dan tranquilidad a un equipo que en los dos últimos años se había caracterizado por jugar bien, pero que en el último semestre de 2010 mostró algunas falencias en el ataque.
Edwin Aguilar, de 25 años,  llegó a triunfar al fútbol colombiano. El panameño prometió a su llegada a Cartagena marcar goles y ya lleva dos en su cuenta personal.
Este domingo, en Neiva, ante el Atlético Huila,  Aguilar tendrá la oportunidad de seguir celebrando goles con el Real, esperemos que así sea...