El IX Panamericano de Béisbol Juvenil AAA fue inolvidable en Cartagena

Cartagena se lució. El IX Panamericano de Béisbol Juvenil AAA “Copa Bicentenario” será recordado por mucho tiempo por los miles de faná-ticos que concurrieron a todas las jornadas en los estadios 11 de Noviembre de Cartagena y Rafael Naar de Turbaco.
La organización fue impecable. La Federación Colombiana de Béisbol y la Alcaldía Distrital trabajaron en llave para que todo saliera a pedir de boca. Esta unión, sumada a un gran despliegue de los me-dios de comunicación y el apoyo de la familia beisbolera local, dieron como fruto el éxito de este Panamericano que le hizo el mejor homenaje al Bicentenario de La Heroica.
Antes del torneo, el compromiso con la Copabe era enorme. Reunir a 13 países no era tarea fácil. Pero gracias al enorme deseo de hacer las cosas bien se pudo realizar un certamen de esta talla con  todas las de la ley.
Ahora los dirigentes del béisbol colombiano pueden gritar a todo pulmón ante América:  ¡misión cumplida!.
El estadio 11 de Noviembre se llenó como en las grandes épocas de la pelota caliente nacional cuando en La Heroica solo se respiraba béisbol.
Este torneo sirvió para despertar a un león dormido: la afición beisbolera de Cartagena, la cual tuvo un comportamiento de 10 puntos.
Pese a que Colombia no clasificó al Mundial de Corea del Sur del próximo año el público aplaudió con gallardía a los equipos rivales que en-frentaron al equipo local. “A Dios lo que es de Dios, y al César lo que es del César”.
Tal vez lo único negativo del evento fue la no presencia de la delegación de Cuba, uno de los equipos favoritos y que su sola presencia garantizaba una expectativa enorme. Pero no hizo falta.
La explicación de los cubanos fue que el aplazamiento del torneo en la fecha inicial les causó traumas, pues ellos tienen un cronograma ya esta-blecido en el año.
La ausencia de Cuba produjo un cambio obligado en la programación ya que el grupo A, donde estaba ubicado Cuba quedó con seis novenas y el B con siete.

Cosas para mejorar
Para futuros eventos internacionales la Federación Co-lombiana de Béisbol tendrá que preparar bien a sus selecciones, con tiempo, para que lleguen con el fogueo necesario a fin llegar lo más lejos po-sible.
El consenso general es que Colombia armó un buen equipo para este Panamerica-no, pero a nuestro representativo le faltó fogueo, pues en las situaciones de máxima pre-sión no supieron resolver con acierto. Muchas acciones de rutina no se hicieron bien y por eso se cometieron muchos errores mentales.
Sin embargo, Colombia demostró que actualmente está en un buen nivel en esta categoría. A Estados Unidos, Canadá, Venezuela y Panamá les hizo grandes partidos, incluso con merecimiento para ganar. Además se le ganó a otras potencias como México y Puerto Rico en la fase clasi-ficatoria.
Y como en otras disciplinas cada categoría debe tener su mánager con antelación y se debe nombrar, también con antelación para cada evento, un gerente deportivo, con relaciones.

Jugadores para mostrar
En la selección Colombia se desta-caron varios peloteros que se con-virtieron en los nuevos ídolos de la afición beisbolera local.
No cabe ninguna duda que el mejor pelotero nacional fue el sincelejano Jorge Alfaro, quien lo dio todo en el terreno de juego.
Se cumplió ante Copabe, tuvimos una buena organización, todos se fueron contentos de Cartagena. Se  hicieron todos los juegos, a pesar de la lluvia, y el respaldo masivo del público fue decisivo. Gente de toda la Costa Caribe y del interior llegó a Cartagena y Turbaco a observar los futuros grandes ligas del área.
El pelotero más valioso del torneo fue el estadounidense Reinaldo Al-mora, mientras que Alexander Bregman, también de Estados Unidos fue el major bateador con un promedio de .571.

Alfaro, el mejor

Jorge Alfaro, prospecto de los Rangers de Texas, equipo doble sub-campeón consecutivo de la Serie Mundial, respondió a la defensiva y a la ofensiva.
Alfaro se llevó el trofeo de más triples con tres. Cada vez que salió a batear recibió la ovación del público. Los equipos rivales le tuvieron mu-cho respeto al prospecto colombiano.
También brillaron con el bate Gerson Jiménez, Edwin Fuentes y Jair Mo-relos. En Colombia el staff de lanzadores fue lo mejor. Se destacaron Nabil Crismatt, Yeizer Marrugo, Edgardo Hernández, Camilo Rocha y Luis Ortega.



Esto dijeron
Judith Pinedo, alcaldesa de Carta-gena

“Cumplimos con el compromiso que teníamos ante los hermanos del área panamericana. El respaldo del público fue maravilloso y demuestra que el béisbol es el deporte por tradición en Cartagena. Terminamos la celebración del Bicentenario muy bien. Fue un año de confirmación para nuestra ciudad como capital deportiva, al ser sede del Mundial de Fútbol Sub-20 y del Suramerica-no femenino de sóftbol”.

Jimmy Char, presidente de la Fe-colbéisbol

“Se cumplió ante la Copabe, tuvimos una buena organización, todos se van contentos de Cartagena. Hicimos todos los juegos a pesar de la lluvia y el respaldo masivo del público fue decisivo. La gente de toda la Costa Caribe y del interior vinieron a observar el campeonato”.

Carlos Julio Ramírez, instructor

“Fue un gran torneo, con un nivel muy importante. Me gustó mucho Estados Unidos, Canadá, Venezuela y Panamá. Son equipos bien traba-jados. Colombia tuvo buen equipo pero falló en las jugadas rutinarias. El pitcheo sacó la cara, fue lo mejor que tuvimos en el Panamericano”.

Alfredo Castellón, narrador

“La organización del Panamericano fue excelente. El torneo tuvo un gran nivel técnico y el público fue lo mejor durante los 10 días. En Colombia lo más destacado fue el pitcheo, que hizo el trabajo, pero lamentablemente en la defensa no se hizo lo debido”.