Enriquecedora. Así fue la charla que sostuvo ayer el Grandes Ligas bolivarense Ernesto Frieri con los niños y jóvenes jugadores de béisbol que pertenecen al colegio Comfenalco.
El auditorio de Comfenalco no dio abasto para albergar a los numerosos niños, padres de familia e instructores que llegaron allí con el deseo de estar cerca al nuevo ídolo del béisbol profesional en Colombia, y a la vez, escuchar sus vivencias y sabios consejos, luego de coronar una gran campaña como lanzador relevista de los Padres de San Diego.
El coordinador de la charla fue el profesor Jairo Ramírez, director de deportes de Comfenalco, quien al final le entregó al pelotero una placa por su gran aporte al béisbol colombiano. También estuvo en la mesa prin-cipal el periodista Walberto Ahumedo Sierra.
Con la humildad que lo caracteriza, Frieri fue enfático en decirles a los pequeños peloteros que “no caigan en el perreo, que eso no sirve de nada. Dejen de pensar en areticos o tatuajes. Hay cosas más importantes en la vida, como las oportunidades que ustedes tienen ahora con una institución como Comfenalco. Yo siempre soñé con estudiar aquí, pero no pude. Ustedes tienen buenos profesores, que saben de béisbol. Aprovechen esas oportunidades”.
Para el “Caballo de Sincerín” lo más valioso y el sendero para lograr el éxito, en cualquier deporte, es la disci-plina y los deseos de supera-ción de cada persona. Y les aconsejó a los futuros talentos que “entrenen duro, tengan disciplina y luchen por sus sueños. Hay que acostarse temprano, estudiar y hacer las tareas porque el estudio es fundamental. Yo nunca perdí ninguna materia, a pasar que entrenaba muy fuerte. Hay tiempo para todo”.
Recordó que comenzó a los 11 años a jugar béisbol (para él muy tarde), gracias a la gesta que hizo Édgar Rente-ría con los Marlins de la Florida en 1997.
“Rentería fue mi espejo. El hit de oro que bateó me sirvió de inspiración para jugar béis-bol. Quise jugar short stop pe-ro era muy malo con el bate. Por eso llegué a ser lanzador. Yo les digo a ustedes que jue-guen en la posición donde les va mejor”.
Frieri respondió una a una todas las preguntas que le formularon niños y jóvenes durante la charla, destacando que es una persona de pueblo, a la cual nunca se le subirá la fama a la cabeza.
La oportunidad
Frieri les aseguró a los chios que en un futuro van a ser firmados por organizaciones de Grandes Ligas que el bono no lo es todo y dio ejemplos de jugadores que firmaron bonos millonarios y no llega-ron al equipo grande por indisciplina.
“Cuando sean firmados aprovechen esa oportunidad. A mí me firmaron en esa época por 12 mil dólares. Ahora han firmado a peloteros por cifras astronómicas. Si yo no fuera aprovechado esta opor-tunidad estuviera vendiendo arepas en el peaje de Sincerín”, aseguró.
En los próximos días, Frie-ri prometió regresar a Comfenalco para dictar una clínica a los lanzadores de esa institución que participaron ayer en la charla. El objetivo es que les dé algunos secreticos de la mecánica de lanzamiento a estos jóvenes, a fin de que mejoren sus movimientos.
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