Inspectores de FIFA con dudas por candidatura de Qatar para Mundial 2022

El jefe del grupo de inspectores de la FIFA dijo que Qatar encara “problemas logísticos” en su intento por organizar la Copa del Mundo de 2022, y expresó dudas sobre la propuesta para organizar un torneo en un país donde los estadios estarían muy cerca uno del otro. El chileno Harold Mayne-Nicholls, líder del grupo de la FIFA, no especificó los problemas que prevé, pero indicó que la sede de un Mundial tiene que poder recibir a cientos de miles de visitantes. Indicó que Qatar no cuenta actualmente con el hospedaje y los medios de transportación necesarios para cumplir con esas exigencias, aunque reconoció que los organizadores “nos aseguraron que esto cambiará”. “Desde un punto de vista organizacional, Qatar tiene el potencial para albergar un evento internacional como una Copa del Mundo de la FIFA”, comentó el presidente de la federación chilena de fútbol. “Pero enfrentaría varios retos logísticos. Hasta ahora, sólo hemos tenido un torneo con un concepto similar de pocas distancias (entre los estadios) y eso fue en el primer torneo organizado en 1930 en Uruguay. Eso funcionó bien hace 80 años, pero como todos sabemos la magnitud del evento ha cambiado drásticamente”. Qatar es la última parada del grupo de inspectores de los nueve países que buscan organizar los mundiales de 2018 ó 2022. El comité ejecutivo de la FIFA elegirá las sedes el 2 de diciembre. La mayoría de los expertos consideran que Qatar, un pequeño país del Medio Oriente de 1,6 millones de habitantes, tiene pocas posibilidades de ganar la sede entre un grupo de candidatos que incluye a Estados Unidos, Australia, Corea del Sur y Japón. También existe la preocupación por el calor que alcanza los 50 grados Centígrado (122 Fahrenheit), el ambiente conservador que podría frenar la fiesta de los visitantes, y las dudas sobre las formas de entretenimiento para los turistas. Mayne-Nicholls no mencionó el calor y la prohibición a la venta de alcohol, y concentró sus comentarios en los planes para los estadios, que según los organizadores de la candidatura es su punto fuerte. Los encargados de la candidatura han pregonado que se trata de un “Mundial compacto”, con estadios localizados a una hora del otro, y destacaron que los fanáticos podrían trasladarse en un nuevo y veloz sistema de metro para ver hasta tres partidos en un día. Las críticas de Mayne-Nicholls son un contraste con los elogios a otras candidaturas para el Mundial de 2022. El jefe del comité organizador de Qatar, Hassan al-Thawadi, admitió que la propuesta enfrenta retos, pero aseguró que el tamaño del país no será la ruina de su candidatura. Prometió encontrar soluciones a cualquier problema señalado por los inspectores y dijo que el país triunfará con lo que llamó “un concepto nuevo e innovador”. “Como es normal con las ideas nuevas, habrá preocupación sobre su implementación”, dijo al-Thawadi. “Hemos visto las preocupaciones y las entendemos. Habrá problemas para la transportación de los fanáticos. Creemos que se pueden solucionar con el itinerario. Cada preocupación que pueda surgir por este nuevo concepto ha sido considerada”. Los diseños de los estadios incluyen un sistema de enfriamiento para la cancha y la gradas, y con partes removibles que le permitirían a los organizadores desmantelarlos después del torneo para donar las gradas a países en desarrollo. Qatar no escatimó en gastos para presentar su propuesta e incluso tuvo a Zinedine Zidane como invitado el jueves. El ex astro del Real Madrid dijo que apoya la candidatura porque sería buena para el Medio Oriente. Qatar indicó que gastará 42.900 millones de dólares en proyectos de infraestructura que estarían listos para el Mundial, incluyendo un sistema de trenes de alta velocidad, un aeropuerto, y una ciudad satélite para 200.000 personas.