Real Cartagena, en la penosa casilla 13

Real Cartagena debe darle vuelta a la difícil situación que atraviesa  —ha sumado un punto de 9 en los tres últimos partidos— sí lo que desea en realidad es pelear el ingreso a las semifinales de la Liga Postobón II.
Luego de la derrota 1-0 del pasado domingo en casa ante Boyacá Chicó quedó claro que  Real, que tuvo un fulgurante arranque, con el transcurrir de las fechas, se ha ido desmoronando.
El 3-0 a favor ante Junior en Barranquilla, bien jugado  en varios pasajes, le mandó un mensaje esperanzador a la hinchada, que comenzó a pensar que tenía buen equipo.
Luego vino el 2-1 en casa ante el Atlético Huila lo que parecía confirmar que se tendría a un equipo que sería fuerte en casa y que sumaría muchos puntos por fuera.
Pero nada, no fue así. Se perdió 3-2 ante Cúcuta en calidad de visitante, no se hizo la tarea en casa ante Caldas (se empató 1-1), se recibieron afuera cuatro goles —pudieron ser más—  en el 4-1 ante el Medellín y por último se dejaron escapar tres puntos como local  ante el onceno de Boyacá Chicó.
Real, que suma 7 puntos, se sitúa en la incómoda y penosa casilla trece, lugar que suelen ocupar los equipos que definitivamente no son protagonistas de los torneos.
Y aunque el torneo ha sido tan irregular (Real hoy está a dos puntos del último, que es el Cali, y a tres del líder Medellín), el equipo cartagenero está en la  obligación de despertar cuanto antes para retomar así la senda de la victoria.
La afición  necesita un equipo combativo y ganador en Cartagena. Del Jaime Morón León no se pueden llevar los puntos con la facilidad que lo hizo el Caldas y Chicó.  En “La Heroica”, los “auriverdes” no pueden ser “pan comido” para los visitantes. De esta plaza se debe hacer un auténtico fortín.
De visitante, Real deberá tomar sus precauciones, pues 7 goles recibidos en tres salidas es muchísimo, tanto que ni siquiera   los seis goles marcados por fuera —a todas luces una buena cifra— sirvieron para sacarle un buen resultado, así sea empates, al Cúcuta y el Medellín.
Por ahora, con lo que se ha demostrado en la cancha, que es muy poco,  al Real solo le alcanza para situarse en la penosa casilla 13.    
 
Para revisar
Caldas y Chicó, equipos que vienen de la altura, han terminado corriendo más que el Real en la calurosa Cartagena, tanto así que a ambos les ha alcanzado para sacar buenos resultados. Siempre se ha dicho, incluso científicamente ha sido comprobado, que para los jugadores que vienen de clima frío es un martirio jugar en Cartagena, no solo por el calor sino por la humedad. ¿Y entonces por qué Caldas y Chicó   corrieron más que el Real?. ¿Será que están mejor preparados que el Real?. Para revisar la parte física de los “auriverdes”.

Improvisación  
Se lesionó Duván Hernández como central, Campo Elías Santa Cruz, que jugaba como lateral izquierdo, lo reemplazó.  Se improvisó al volante Eduardo Carrillo en la posición en la que inició Santa Cruz  y ahí vinieron los problemas. El cartagenero, quien no tiene experiencia, poco o nada conoce la posición de marcador,  tuvo que jugar además con perfil cambiado, pues siendo derecho lo pusieron a marcar la izquierda.

La reflexión
Quedó claro una vez más que José Nájera y Emanuel Molina dan resultados cuando los utilizan en el esquema de cinco volantes y un delantero. Nájera y Molina actuaron al lado de David Silva, Eduardo Carrillo y Jhon Hernández en la zona medular en las dos únicas victorias que acumula el Real, el 3-0 frente a Junior y el 2-1 ante Huila. Los hechos hablan por sí solos. Nájera y Molina rinden muy poco en el sistema 4-2-2-2. Luego entonces habría que pensar en utilizar el esquema que da resultados.