Cartagena se lució con un buen espectáculo de principio a fin. Todo salió como se planeó, como se tenía previsto y por eso muchos se sintieron ayer más cartageneros que nunca.
El sorteo del Mundial de Fútbol Sub-20 fue de lujo, como tenía que ser, cómo lo había prometido. Sí. Cartagena se sobró, siguió embrujando a todos aquellos que nos visitaron durante la realización del sorteo.
Un elegante Muelle de los Pegasos, con sus pequeños barcos llenos de colores, se encargó de embellecer el panorama a las afueras del escenario.
El iluminado Centro de Convenciones lució imponente, con el mejor de todos los maquillajes y muy acorde para la ocasión.
A las 6 y 15 de la tarde comenzaron a llegar los invitados, quienes fueron atendidos con la misma amabilidad de siempre, con esa gracia que caracteriza a los cartageneros.
Después de tomar una copa de vino y de hablar de todo un poco las personalidades pasaron al salón Getsemaní, el sitio escogido para el sorteo.
Ya estando adentro, a las 8:06 de la noche se inició todo. La hermosa Carolina Gómez fue la encargada de darle la bienvenida a los asistentes.
Jorge Celedón fue el encargado de ponerle el toque de sabor al interpretar Nuestra Fiesta, el himno del Mundial. La canción entusiasmó al público asistente, que con sus aplausos acompañó ese momento de alegría, ese rato de jolgorio, digno de una fiesta como esa.
Luego vino la muestra de un video con las mejores jugadas y los goles de los mundiales sub-20 anteriores. Las imágenes llenaron de más alegría el recinto, pues el público trasladó su mente por un instante a los que sería el Mundial de Fútbol Sub-20 de nosotros, ese que iniciará el 29 de julio.
Acto seguido aparecieron quienes sacarían las balotas: Judith Pinedo, Carlos Valderrama, Óscar Córdoba y Yoreli Rincón.
Una vez terminado el sorteo se presentaron varias muestras de bailes con música que identificaba a cada una de las ciudades que serán sedes de la cita orbital.
Cartagena es y será siempre encantadora. Los invitados de anoche así lo reconocieron...
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