Además de Colombia, según el director del programa de Postgrado en Ciencias Ambientales y Ocupacionales y co-director del Centro para Realidad Virtual del Centro de Diseño en Cuidado a la Salud de la Universidad de Purdue, en Lafayette, Indiana (EEUU), el virus del Ébola entraría pronto al continente, por lo cual los gobiernos latinoamericanos deberán prepararse con políticas oficiales unidas para afrontar la enfermedad, que para enero de 2015 habría alcanzado un millón cuatrocientos mil contagios en el mundo.
El Prof. McGlothlin, Master en salud pública con doctorado en salud industrial, quien fue ponente central en la Convención Científica de la Universidad de Cartagena, le dijo a El Universal que los países que en este momento se encuentran libres del virus deben trabajar para no repetir los errores cometidos en España y Estados Unidos, donde los protocolos de seguridad no fueron suficientes para contener la aparición de la enfermedad.
McGlothlin advirtió sobre la importancia de cumplir con el entrenamiento adecuado del personal médico que tendrá la responsabilidad de atender los posibles casos y sobre todo resaltó que en países como Colombia, con un “frágil sistema de salud”, los gobiernos se deberían concentrar en controlar la fuente de la enfermedad (paciente detectado), lo que resulta más eficaz para contener la proliferación del virus.
EL VIRUS NO DISCRIMINA
Uno de los aspectos que resaltó el especialista en su entrevista es que contra el ébola tres cosas son indispensables ahora: el aislamiento o la cuarentena, una pronta detección (identificación), y la necesidad de una vacuna.
Dado que estudios estadísticos y modelos epidemiológicos desarrollados en Purdue sobre el virus dan cuenta de su potencia y rápida propagación, el epidemiólogo recomienda una mayor conciencia por el autocuidado personal, como el permanente lavado de manos y uso de mascarillas, ya que se siguen estudiando las fuentes de contagio de la enfermedad que ya no solo se reducen al contacto directo con la persona infectada.
Lo anterior lo aclaró McGlothlin cuando se le preguntó acerca de la manera en la que las enfermeras estadounidenses contrajeron el virus, aún guardando los protocolos.
Según el epidemiólogo el hecho de “no seguir exactamente” las recomendaciones para usar el equipo de seguridad, habrían sido determinantes para que las dos mujeres resultaran contagiadas.
En cuanto a las consecuencias de la rápida expansión del virus, que ya llega a los 10 mil contagios, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), McGlothlin advirtió que tendrá serias consecuencias sociales y económicas en el mundo, recordando la “gripe española”, la peor pandemia de la historia de la humanidad.
McGlothlin destacó que la preparación de los países debe tener en cuenta que de ninguna manera se puede discriminar en la atención médica que requerirán los pacientes, por lo cual deben estudiarse modelos con los que se controle la fuente (persona infectada), en vez de pensar en equipos y de seguridad para todo el personal de la salud, que elevarían los costos de la atención médica.
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