Carne pa' mí se queda en Cartagena

Los habitantes del suroriente de Cartagena le madrugaron al programa “Carne pa’ ti, carne pa’mí” de la Fundación Colombia Ganadera (Fundagán), que oficialmente se inició ayer en esta capital. Desde las seis de la mañana muchos habitantes ya se hacían colas al frente de los patios de Cooprotrabol, a la entrada de Fredonia. A las 7:30, cuando llegó el furgón con una y media tonelada de productos cárnicos, los aplausos rompieron el silencio de esa zona y las más de 300 personas que hacían fila se acomodaban para hacer sus pedidos. Más de 2.000 personas fueron atendidas al final en el puesto de suministro, las que agotaron toda la existencia de costillas carnudas, bofe, patas de mondongo, pajarilla, hígado y hueso carnudo que llegó en el furgón refrigerado desde Corozal (Sucre). La alcaldesa Judith Pinedo acudió al sitio y personalmente entregó a varios de los beneficiarios del programa bolsas con los productos cárnicos, a razón de 2.000 pesos por porción. “Este programa de Fedegán llegó y se queda en Cartagena. El Distrito suscribirá un convenio con Fundagán y ello nos permitirá llevar los beneficios de esta iniciativa a los barrios donde habitan las gentes de menor poder adquisitivo. Aportaremos un recurso que nos permitirá mantener un furgón durante toda la semana”, aseguró la Alcaldesa. Definido el convenio la Alcaldía diseñará el cronograma de visitas a los barrios. A su turno, María Fernanda Cabal de Lafaurie, presidenta de Fundagán, añadió que copia del convenio a suscribir con la Alcaldía ya es revisado por la sección jurídica de la entidad y en dos semanas podría estar definido. La Alcaldía adquirirá un furgón que entregará en comodato a Fundagán, que lo administrará y lo podrá traer a Cartagena repleto de productos cárnicos, aseguró. Patios productivos En esta oportunidad la entrega de productos cárnicos estuvo acompañada de una variada oferta de frutas, verduras y pescado de los llamados patios y estanques productivos de los Centros de Vida que impulsa el Distrito, a través de la Umata. Pepinos, rábanos, habichuelas, ají dulce, tomate, col y pimentones orgánicos se ofrecían a quienes compraron carne, para completar el sancocho, desde 500 pesos. La novedad fueron las cachamas, de los estanques de la vereda de Púa (cerca de Arroyo Grande), que se ofrecían casi a mitad de precio, aseguró Luis Magín Guardela, director de la Umata. Reacciones María Hernández, una ama de casa del barrio Nuevo Paraíso, fue una de las primeras en comprar. “Llevo mondongo, bofe y costilla. Esto me alcanza para 4 días. Este es un buen programa, deben traer no uno sino dos camiones. Hoy (ayer) la sopa será de mondongo en mi casa”, aseguró María, a quien sus recursos no le permiten comprar ese tipo de alimentos sino una o dos veces por semana. Desde el barrio Boston, sector El Pueblito, llegó María Pérez Ayola. Ella hizo fila desde las 7:15 de la mañana y adquirió 10 mil pesos en patas de mondongo, bofe, hígado, costilla y pajarilla, suficientes para los siete miembros de su familia. “Aquí los productos son más baratos y esta es una buena idea”, precisó. A su turno, Yorley Berrío, quien llegó al sitio con su hijo en brazos, también desde Boston, debió superar una fila de 100 personas, pero logró adquirir 8 mil pesos en patas de mondongo, bofe, hueso carnudo y costillas, suficientes para los alimentos de los miembros de su familia. “Esta es una excelente idea”, dijo sonriente la joven ama de casa.