Colombia se destaca como un mercado abierto a las inversiones

La llegada del banco brasileño Itaú BBA a Colombia no solo se celebró en medio de obras de arte, pues la ceremonia tuvo lugar en el Museo Nacional de Bogotá, sino en el marco de una discusión al rededor del nuevo orden económico mundial.
Para hablar de las relaciones entre América Latina y Europa, Itaú BBA reunió a tres de los personajes más influyentes y recordados de ambas regiones: por un lado contó con la participación del expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero, por otro con la presencia de los expresidentes Ricardo Lagos (Chile) y Cesar Gaviria (Colombia).
Candido Bracher, presidente de la entidad financiera, celebró el inicio de operaciones del mayor banco corporativo de Brasil y destacó que Colombia sea un mercado “abierto a las inversiones, pujante en la economía, de espíritu emprendedor, avanzando hacia nuevos escalones y con un empresariado moderno, serio y emprendedor”.
Del mismo modo, se refirió Ilan Goldfajn, jefe económico de Itaú Holding, quien dijo que Colombia tenía un “potencial alto de inversión porque goza de un sistema financiero sólido e inflación baja”. Sin embargo, las intervenciones de los expresidentes desataron un debate en torno a el papel de América Latina y la necesidad de que se integre en un bloque que lo haga más competitivo.
El expresidente César Gaviria explicó que acceder al mercado europeo implicaba mucho trabajo, por lo que se mostró positivo respecto a la posibilidad de que Estados Unidos firme un tratado comercial con la Unión Europea al considerar que este le facilitaría también el comercio a América Latina al abrirle más puertas y oportunidades.
En ese sentido resaltó el esfuerzo de Chile, Perú y México, países que hacen parte de la Alianza del Pacífico junto con Colombia y de los avances logrados. “Necesitamos unos refinamientos pero no va a hacer algo difícil, nosotros le estamos apostando al libre comercio hace un buen rato, sobre todo Chile y México que han logrado más que Colombia que apenas comenzó y va a ser agresiva en eso”, dijo.
Con respecto a la relación con Brasil indicó que es un país que le apostó todo el mercado a la Organización Mundial del Comercio (OMC) y que por eso mismo las relaciones económicas con Colombia son “poca cosa” y “no hay un real comercio”. En ese sentido llamó a Brasil a definir si se unirá a la Alianza del Pacífico o tendrá un acuerdo con Estados Unidos
“Brasil tiene una industria gigantesca y si no se abre al comercio va a terminar teniendo dificultades. Necesitan un cambio dramático en su política para tener más confianza, olvidarse de la OMC, o sino va a tener problemas serios en el futuro”, explicó Gaviria, al tiempo que trazó un plano comparativo con la situación de Colombia.
“Brasil es una economía bastante cerrada y parte de la enfermedad holandesa que tienen se debe a razones de infraestructura y arancelarias. Lo mismo que Colombia porque acá vivimos convencidos de que somos una economía abierta, pero no tenemos infraestructura y tenemos un sistema arancelario endemoniado”, lamentó el expresidente, de manera que recomendó seguir el ejemplo de Chile y Perú de tener un solo arancel para lograr “una tasa de cambio más competitiva”.
Finalmente, puntualizó que si bien Colombia pasa hoy por “un gran problema, no es una tragedia, se puede resolver, es un tema de política económica” y destacó que se tenga un crecimiento entre el 4,5% y el 5%.
Asimismo, el expresidente de Chile, Ricardo Lagos, resaltó que “América latina pasa por un momento estelar, no me cabe duda que estamos teniendo una capacidad de surgimiento frente a otras economías y Colombia va a estar entre los tres mejores países de la región”.
Además, puso la economía de su país como ejemplo: “nosotros decidimos abrirnos y competir en el mundo a pesar de ser un mercado pequeño, de hecho, el 95% de nuestro comercio está bajo tratados de libre intercambio”.
También recomendó que América Latina “actúe como una sola, si no difícilmente seremos escuchados porque la negociación con Europa y Asia es compleja”, dijo al tiempo que recordó sus conversaciones con Estados Unidos y las exigencias que los obligaron a cambiar ciertas cosas de la legislación, aún cuando ellos no pudieron exigir lo mismo para sí mismos.