El objetivo es recuperar el inventario ganadero y fortalecer la oferta exportable de carne y productos cárnicos, precisa el Ministerio.
“En el mundo, la oferta de ganado se ha visto reducida por fenómenos climáticos lo cual, sumado a un aumento en la demanda de carne, ha conllevado a que los países tomen medidas que les permitan mantener sus inventarios ganaderos para atender su demanda interna, y aprovechar el buen momento de los precios de productos cárnicos con valor agregado”, asegura el mensaje ministerial.
Colombia no ha sido la excepción y dadas las ventajas comparativas como productor de carne (ocupa el puesto 11 en el mundo en el ranking de países con hato ganadero), ha emprendido una política de Transformación Productiva que le permite aprovechar esas oportunidades que le brindan los mercados externos. Adicionalmente, el restablecimiento de las relaciones con Venezuela, si bien resulta de la mayor importancia para el país, también hace necesario tomar medidas que permitan establecer los flujos comerciales sin poner en riesgo la política de repoblamiento bovino.
Posición de Fedegán
El presidente de Fedegán, José Félix Lafaurie, también se refirió a los alcances del Decreto 2000, señalando que “los países exportan productos con valor agregado. Entre más valor agreguen, más riqueza incorporan a su sociedad, porque el intercambio es mucho más favorable y eso significa más empleos, mayor ahorro e inversión y más bienestar social. Así entiendo la política del Gobierno y más cuando junto con el Ministerio de Comercio, el sector ganadero desarrolla un ambicioso Programa de Transformación Productiva que, entre otros, lo lidera Augusto Beltrán Segrera”, un dirigente y ganadero bolivarense.
“Entiendo la preocupación de los ganaderos, sobre todo los de la Costa Caribe, que tienen más de dos años en una situación muy compleja: bajos precios, la estructura de costos y los temas ambientales. Y claro, las exportaciones mejoran el precio del ganado, y limitar contingente podría entenderse como si las exportaciones no estuvieran autorizadas. Lo que el Gobierno ha hecho es delimitar unas exportaciones a través de unos contingentes que pueden ser ampliados cuando lo requieran”, dijo Lafaurie.
El dirigente también respondió a quienes piensan que Fedegán influyó en la expedición del Decreto 2000 como estrategia para proteger a los frigoríficos, señalando que “Fedegán no tiene una sola acción en Friogán. El socio y mayoritario es el Fondo Nacional del Ganado. Y el Fondo es de todos los ganaderos, aunque lo administre Fedegán. Friogán es el mejor instrumento para que el ganadero se defienda en la formación de precios al consumidor... Algunos ganaderos no entienden la importancia estratégica de Friogán. La entenderán cuando venga la competencia externa por los TLC y los monstruos de la carne lleguen aquí...”.
Adicionalmente, precisó que “el Decreto lo expide el Gobierno, responsable de la política pública. Por supuesto, que el Gobierno oye al sector y decide lo que cree que le sirve al sector ganadero y al país, no a unos pocos comercializadores, por importantes que sean”.
Ganado de pre ceba
Sobre el impacto que traería a la ganadería nacional el exportar ganados de pre ceba (machos de 250 a 260 kilos), el Presidente de Fedegán expresó: “cuando la Costa estaba muy entusiasmada con Venezuela, más de 245 mil animales en pie salieron para allá sólo en 2006, y se exportaron 20 mil toneladas en canal y despostadas. El total exportado sólo alcanzó 271 millones de dólares. Dos años después, en 2008, al limitar las exportaciones en pie, salieron únicamente 8.449 animales, y en cambio se exportaron más de 750 millones de dólares.
Si en 2009 no se hubiesen suspendido por los problemas políticos de entonces, se habrían exportado más de 1.000 millones de dólares, monto jamás visto en la historia ganadera. A junio de ese año ya se habían facturado 604 millones de dólares. Conclusión: es mejor exportar con valor agregado que en pie. Supongo que eso es lo que el Gobierno busca”.
Lafaurie se preguntó ¿cuánto valor agregado hay en un ternero de 250 kilos? Poco. A duras penas se inicia el encadenamiento productivo. ¿Es justo que la ganadería colombiana se conforme con tan poco? ¿Cuánto empleo se deja de dar? ¿Cuánta riqueza se va de nuestras manos? Con exportar a esos pesos, sólo se enriquecen los mismos comercializadores que hicieron su agosto con Venezuela y luego, en la mitad de la crisis, cuando nuestro ganado bajo en más de un 30%, desaparecieron”.
Los ganaderos
Estos son algunos de los conceptos de ganaderos de la Región frente a la entrada en vigencia del Decreto 2000, que expidió Mincomercio y que limita las exportaciones de ganado en pie:
Horacio Del Castillo
“El Decreto que restringe las exportaciones (Decreto 2000 del 8 de junio) afecta enormemente nuestra capacidad para producir, pues en estos momentos la cría es un pésimo negocio y en esta actividad están la mayoría de los ganaderos en Bolívar, que son, en un 95%, pequeños productores”.
“Nosotros los ganaderos tenemos un déficit de flujo de caja que viene de hace dos años acumulado, he podido salir ahora por que los exportadores pagan de contado, mientras que los frigoríficos pagan a 60 días”.
Javier Hernández Capella.“Esto me afecta totalmente. Tenía programadas ventas para los próximos 3 meses y ahora no tengo a quién venderle. Por otro lado, la subasta de Sincelejo se bajó en su precio en la última semana en 150 pesos el kilo, para el ganado pequeño”.
“Las exportaciones de ganado han permitido que el precio del ganado se regule, porque el mercado nacional una vez conoce que aquí no hay exportación baja los precios al productor, sin bajar el precio de la carne al consumidor final”.
“Aquí los ganados estuvieron hasta en 2.400 pesos el kilo y nunca bajó el precio a los consumidores. El año pasado con los 40 mil animales exportados, lo que aumentó el precio fue 100 pesos”.
“El sistema de pago de los exportadores es mejor. El comprador nacional lo paga a 60 días, estamos financiando las cadenas cárnicas de Colombia y eso no es justo”.
La política ganadera
Fedegán también defendió la existencia de una política ganadera, que a juicio de algunos ganaderos no existe.
“El Gobierno, desde hace más de siete años, recoge los planteamientos de los ganaderos para desarrollar y modernizar la ganadería. El Plan Estratégico de la Ganadería Colombiana, PEGA 2019, resultó de una visión compartida con el Gobierno, en cuya elaboración participó el Ministerio de Agricultura y Planeación Nacional...”, dijo José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán.
El dirigente insistió que “Colombia debe exportar valor agregado y no la semilla del valor agregado. El problema de abrir exportar novillos es que seremos nuevamente exportadores de ganado en pie, una etapa que habíamos superado, y habíamos avanzado a exportar carne en canal y deshuesada, dejando para el país esos valores agregados. Exportar novillos no es lo que se busca para la ganadería colombiana”.
La propuesta de Fedegán es que Colombia debe ser exportador carne de bovino, y buscar que la oferta responda continuamente a esa demanda en cantidad y calidad para posicionarnos en los mercados externos, y esto no se logra vendiendo ganado de levante.
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