Económica


Minería, la locomotora de la economía

COLPRENSA

29 de marzo de 2010 12:01 AM

Con el crecimiento de la economía en 2009 de 0,4 por ciento, se espera que en 2010 la minería y la realización de algunas obras de infraestructura, que aún están pendientes de ejecución, impacte positivamente el Producto Interno Bruto del país (PIB). "En el 2010 el sector jalonador va a seguir siendo la minería y las exportaciones de materias primas, que gozan de un buen precio a nivel internacional", aseguró el catedrático de la Facultad de Economía de la Universidad del Rosario, Gonzalo Palau Rivas. Al igual que el Gobierno, Palau Rivas espera que la industria presente una reactivación a lo largo del año para que se convierta en un verdadero motor de crecimiento que, adicionalmente, ayude a reducir la alta tasa de desempleo. Según el director del Departamento Nacional de Planeación, Esteban Piedrahita, los sectores más dinámicos durante el presente año serán la minería, la construcción y la industria, con crecimientos porcentuales de 10; 2,7 y 2,5, respectivamente. El representante de CSS Constructores, Daniel Benavides, considera que este es un buen año para la infraestructura en general, ya que aún están pendientes licitaciones como la del primer sector de la Autopista de las Américas y el tercer tramo de la Ruta del Sol. "En ejecución hay proyectos de gran magnitud como las megaobras de valorización en Cali, los sistemas de transporte masivos en ciudades intermedias y las hidroeléctricas como Porce IV, el Quimbo, Hidrosogamoso e Hidrohituango, entre otros", recordó. Las perspectivas de un mejor entorno económico también ha llevado a que algunos consideren que el PIB llegará incluso a superar el 2,5 por ciento esperado por el Gobierno. Tal es el caso de Value Makers S.A., que espera un incremento del PIB de 2,8 por ciento, como resultado de una mejor situación de los diferentes sectores a nivel local y de un mejor panorama externo. Alianza Valores supera de lejos la proyección del Gobierno y "con base en la tendencia observada en el último trimestre de 2009 y de los datos disponibles en 2010 (enero y febrero) modificamos nuestra proyección de crecimiento para este año de 2.5 por ciento a 3.5 por ciento". El decano de la Facultad de Economía de la Universidad de los Andes, Alejandro Gaviria, considera que la mejor apuesta es que el crecimiento de este año sea de 2,5 por ciento, pero que todavía persisten problemas que lo llevan a no ser tan optimista. "A diferencia del 2009, los inconvenientes con Venezuela se van a mantener todo el año y en desempleo nadie es optimista, por lo que no se ve una reactivación del consumo", agregó Gaviria. Consideró, que hay señales encontradas, porque si bien el país logró un crecimiento, al descomponerlo se observa que fue jalonado por las obras civiles que no se darán en la misma magnitud en el 2010. Una de las principales preocupaciones para este año es la reducción de la tasa de desempleo y, por consiguiente, el crecimiento de los sectores manufacturero y de comercio. "El crecimiento de 2010 sería dado eventualmente por el sector minero, que no tiene un impacto importante en la generación de empleo, y la construcción dependería de obras públicas, por lo que el Gobierno tendría que darle un mayor dinamismo", dijo el decano de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional, Jorge Iván Bula. El catedrático considera además que no están dadas las condiciones para que el país alcance un crecimiento de 2,5 por ciento en 2010. MANTIENEN EXPECTATIVAS PARA EL PIB El director del DNP, Esteban Piedrahita, dijo que el Gobierno mantiene en 2,5 por ciento la expectativa de crecimiento para el 2010. Aunque el ministro de Hacienda, Óscar Iván Zuluaga, no descartó la posibilidad de revisar al alza la meta, consideró que una determinación de este tipo sería prematura debido a hechos como la situación de la economía europea. El Banco de la República también sostuvo su pronóstico de crecimiento en el rango de entre el dos y el cuatro por ciento. El gerente del Emisor, José Darío Uribe, aseguró que el impacto de la caída de las exportaciones a Venezuela tuvo un impacto negativo en 2009 y lo va a tener también en 2010, pero habrá una mayor diversificación.

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