Económica


"Vacas por la paz", semillero de ganaderos

Un primer lote de vacas aguardaba, en un corral de la zona de subastas del Coliseo de Ferias Fulgencio Segrera, a sus nuevos propietarios.En las tribunas, más de un centenar de personas, entre beneficiarios y acompañantes, provenientes de corregimientos y áreas rurales de Cartagena trataban de seleccionar la vaca de sus preferencias, pero sólo un sorteo les diría cuál sería el ejemplar que los convertiría en pequeños ganaderos.
La mayoría de los beneficiarios son pequeños productores agrícolas que sólo hasta ahora, con el apoyo de la Umata Distrital y la Fundación Colombia Ganadera (Fundagán), empiezan a tener experiencia en producción ganadera gracias al programa “Vacas por la Paz”, una iniciativa de responsabilidad social de la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán).
El pasado jueves, el programa culminó la entrega de 100 vacas a familias campesinas del área rural de Cartagena, donación que hizo la Alcaldía.
La alcaldesa Judith Pinedo fue la encargada de hacer la entrega de estas últimas donaciones, en compañía del director de la Umata, Luis Magín Guardela y de los representantes del sector ganadero seccional, Augusto Beltrán Pareja y Miguel Torres Badín, presidente del Comité de Ganaderos de Bolívar y miembro principal de la Junta Directiva de Fedegán.
Un sorteo permitió asignar las vacas a los beneficiarios y Julia Mena, de Henequén se quedó con la Nº 47, tras sacar de una bolsa ese número, en medio del aplauso de otros representantes de su comunidad. Julia no ocultó su alegría y hoy le dicen la ganadera.
El programa
El Programa “Vacas por la paz” se inició el 14 de mayo del año pasado, fecha en la cual la Asociación de Mujeres Unidas de El Salado (corregimiento de El Carmen de Bolívar) recibieron 10 vacas y un toro, convirtiéndose en las primeras beneficiadas en el Departamento.
“Este es uno de los tantos programas de Responsabilidad Social que tiene el gremio ganadero, que se ha impuesto como meta mostrar la verdadera cara del ganadero colombiano. En la ‘Cena una vaca por la paz’, en Bogotá, se contabilizaron 941 reses donadas en una noche, posteriormente y hasta hoy siguen donando y se han sobrepasado las mil reses”, señala Torres Badín.
“Hoy – jueves 20 de enero- entregamos 100 reses al área rural del Distrito de Cartagena, con aportes de la Alcaldía. La próxima semana se entregarán las 40 reses recogidas entre los propios ganaderos”, agregó la fuente.
Los beneficiarios del programa son preferiblemente mujeres cabeza de familia, víctimas de la violencia, pequeños ganaderos o comunidades que tengan parcelas, a quienes se les capacita. Su compromiso es no vender la vaca durante 7 años, dar al programa la primera cría y Fedegán aporta la asistencia técnica, la salud animal, y la formación como pequeños ganaderos.
La entrega hecha esta semana en el Coliseo de Ferias Fulgencio Segrera benefició a pequeños productores del área rural de Cartagena (Arroyo de Piedra, Bayunca, Membrillal, Pasacaballos, Arroyo Grande, Manzanillo del Mar y Tierrabaja, entre otros).

Apoyo
“El Distrito le apuesta a esta iniciativa porque hace parte del Programa Cartagena Superación de Pobreza, del Plan de Emergencia Social Pedro Romero, que determina que la inversión tiene que hacerse para igualarnos y se iguala con inversión en educación, en desarrollo económico, mejoramiento de vivienda y mejores condiciones. En el área rural no teníamos un programa que nos permitiera hacer un cambio real en las condiciones económicas de la población rural de Cartagena”.
“Este es un superbuen programa, hacemos una inversión como esta, entregamos estas unidades, y Fundagán se queda con el acompañamiento por 7 años, lo cual para nosotros es maravilloso, porque es acompañamiento técnico y de mejoramiento. Esto supera la  ganadería tradicional y vamos a seguir ampliando el programa”.

Los beneficiarios

Leogibildo Castillo, Membrillal
Es el representante de la comunidad indígena Zenú, radicada en Membrillal, al oriente de Cartagena.
“Hoy, en esta entrega, estamos 20 personas, que recibiremos la donación a nombre de la comunidad”.
“El cabildo indígena Zenú tiene 8 años en Membrillal. Llegamos por desplazamiento desde Tolú (Sucre). Buscamos tierras y el programa ‘Vacas por la paz’ es un beneficio a la comunidad indígena desplazada, que va a ser un éxito y agradecemos a la Alcaldesa su apoyo”.
“En Membrillal somos 150 familias. En estos momentos estamos negociando una finca de 8 hectáreas. El programa será un éxito, a pesar de nuestra pobreza, pues un litro de leche es muy importante para esta comunidad”.

Claudia Cecilia Rodríguez Barboza – Bayunca.
Durante muchos años, Claudia Cecilia se ha dedicado a cultivar yuca, fijol, melón, patilla y ají en un pequeño terrero que alquila, junto a su marido, en las afueras de Bayunca. Ahora diversifica su actividad con la producción ganadera gracias al programa “Vacas por la paz”.
“Nos entregan la vaca preñada y nosotros devolvemos esa primera cría para donarla a otra familia. La experiencia es muy buena con el aprendizaje, el compañerismo. Nos han capacitado, nos indican cómo cuidarlas, qué clase de alimentos darles, cómo actuar en el siguiente fenómeno del Niño que se acerca”.
“Yo tengo dos vacas, pero de mi comunidad serán 12 los beneficiados. Tenemos un acompañamiento de los técnicos de la Umata, quienes nos han hecho un seguimiento y han visto que somos unas personas que queremos seguir adelante y que necesitamos de estos programas. En el grupo  de beneficiarios hay desplazados, una familia de El Salado (El Carmen de Bolívar), e indígenas.
Claudia Cecilia ya le tiene nombre a su vaca, la llama “Primicia”.

 

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