Cartagena de Indias cada día está más a expensas del mar por el incremento en su nivel medio, atribuido principalmente al calentamiento global y el deshielo de los polos. Tendemos a olvidar este fenómeno durante el año, hasta que vuelven a aparecer las mareas altas y nos lo recuerdan al inundar buena parte de la ciudad costera. Cada año hay una nueva marea más alta que las demás, y que entra a lugares a los que nunca antes había llegado. Hay una película llamada “La tormenta perfecta” porque coinciden una serie de circunstancias que la hacen terriblemente grave, es decir, todos los factores que la pueden volver “perfecta” en cuanto a lograr su ferocidad mayor. En el caso de las mareas, podría pasar algo similar. Las mareas dependen de dos fenómenos principales, aunque no son los únicos: las mareas astronómicas, que son predecibles porque dependen de la posición de la tierra con respecto a los astros, y las mareas meteorológicas, que dependen del clima, y de que haya o no tormentas que influyan sobre el nivel del mar. La “marea perfecta” para hacer desastres, por ejemplo, sería una en la que coincidieran la marea astronómica más alta, con una marea meteorológica crecida por tormentas cercanas, que a su vez podrían crear remolinos oceánicos cerca de las costas, “arrinconando” el mar contra la tierra a través de sus giros y del viento, elevando su nivel de manera extraordinaria. En estas circunstancias habría olas masivas que entrarían tierra adentro sobre la marea alta, causando muchos daños. Se asemejaría a lo que hizo el coletazo del huracán Joan en Cartagena en 1988, aunque en aquella época el nivel medio del mar era más bajo porque el calentamiento global no había avanzado como ahora. Aún así, hubo lugares de Bocagrande en que el mar y la Bahía se unieron por una lámina de agua durante algunas horas. Menos mal que esta Administración le ha parado bolas al nuevo nivel del mar y tiene planes para contrarrestarlo, como los anunciados ayer y hoy en este diario, que incluyen un plan piloto en Bocagrande, Castillogrande y El Laguito. Está bien que se construya un muro de 55 cm en el litoral, que permitirá ganar tiempo, pero la ciudad tiene que tener planes más sólidos, como levantar la altura de las calles de los lugares vulnerables, lo que a su vez querría decir que muchas casas se inundarían, al menos en la primera planta, al igual que los primeros pisos de algunos edificios hechos por constructores con visión corta. El calentamiento global y el incremento en el nivel medio del mar han sido anunciados durante años, y este periódico lleva cerca de una década tratando el fenómeno con alguna frecuencia. El presidente electo, Juan Manuel Santos, tiene que poner el calentamiento global y el nivel medio del mar creciente como una prioridad de su agenda, ya que las soluciones para las áreas pobladas en los litorales colombianos, incluyendo Cartagena, serán costosas y no tolerarán improvisaciones.
NOTICIAS RECOMENDADAS
Comentarios ()