Editorial


Cartagena se lució en el Mundial Sub 20

Colombia fue eliminado en los cuartos de final del Mundial Sub 20 de fútbol, al caer 3-1 frente a México, pero sin duda alguna será el campeón de la hospitalidad y la organización de este importante evento y los 24 países asistentes se llevan un recuerdo imperecedero de las virtudes de nuestro país.
Las ocho ciudades en las que se realizaron partidos hicieron todos sus esfuerzos para cumplir con lujo de detalles su papel de anfitrionas de jugadores, técnicos, periodistas y aficionados de diferentes países, mostrando unos estadios renovados y una organización impecable, que demuestra la capacidad que tiene Colombia para realizar eventos de magnitud internacional.
Entre las ocho ciudades, hay que hacer un reconocimiento especial, por supuesto, a Cartagena, que fue escenario de cinco juegos, tres de la fase de grupos, uno de octavos de final y uno de cuartos de final, estos dos últimos con casi 16 mil espectadores y un comportamiento impecable, no sólo por su amabilidad, tranquilidad y alegría. Una vez más quedó demostrado el buen talante de nuestra gente.
Curiosamente, una buena parte de los que asistieron a estos cinco partidos del Mundial Sub 20 en el estadio Jaime Morón, lo hizo más por ver de cerca las obras de remodelación de ese escenario deportivo, que por estar interesados en el fútbol juvenil.
En las tribunas había numerosas señoras mayores de 60 años, que seguramente no sabían quiénes estaban jugando, pero que sí estaban enteradas de la importancia de este torneo deportivo, y sobre todo, del honor que tuvo Cartagena de ser una de las sedes, y por eso gritaban entusiasmadas a uno u otro equipo indistintamente, animando en realidad a todas esas personas que con su trabajo hicieron posible que el estadio local fuera escenario digno de un Mundial de fútbol.
Ni siquiera el percance con la iluminación durante el juego entre Francia y Ecuador, que dejó el estadio a oscuras durante 12 minutos, pudo empañar el desempeño digno de la ciudad, que cumplió con creces la delicada misión que se le encomendó, porque a pesar de la gravedad de ese apagón, todos entendieron que se debió a causas ajenas al numeroso equipo encargado de organizar los juegos que se realizaron aquí.
El balance exitoso del Mundial Sub 20 en Cartagena debe servir para empezar una nueva etapa en el fútbol profesional de la ciudad, cuyo primer paso es el refuerzo de la nómina de jugadores del Real Cartagena, para conformar un equipo competitivo, capaz de disputar los títulos de la Liga Profesional y de la Copa Colombia, de manera que podamos tener aquí partidos internacionales de la Copa Libertadores o de la Copa Sudamericana, sabiendo que seremos un escenario idóneo digno, como lo fuimos en este Mundial.
También es importante que tanto el Real Cartagena como la afición local, y en general toda la ciudadanía, se comprometan a cuidar y a proteger el hermoso estadio que nos dejó el Mundial, que lo defendamos de los vándalos y de los desadaptados, y que nos sintamos orgullosos de mostrarlo a quienes nos visitan.
No es iluso soñar con un futuro cercano de competiciones internacionales de fútbol, organizadas aquí, a las que se invite a los equipos más importantes y de mayor nivel de las mejores ligas.

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