Sólo el 40,7 por ciento de la población en edad de trabajar dice ser lector habitual, pero exclusivamente de temas directamente relacionados con su profesión o de textos escolares.
La mayoría de quienes aseguran no ser lectores frecuentes lo atribuye a la falta de tiempo, a la dificultad de acceso a los libros y a la carencia de hábitos de lectura.
En esta versión de la Feria Internacional del Libro de Bogotá, uno de los eventos más importantes de la industria editorial colombiana, los ministerios de Educación y Cultura anunciaron la unión de sus esfuerzos para sacar adelante una nueva etapa del Plan Nacional de Lectura y Bibliotecas, que se concentrará ahora en el fortalecimiento y uso de la infraestructura de bibliotecas, de manera que se siembre de nuevo entre los colombianos la lectura por placer, además de la lectura por requerimientos o necesidades profesionales.
También en la Feria del Libro, universidades, institutos y organizaciones culturales de todo el país están presentando sus iniciativas para el fomento de la lectura y los hábitos de consumo cultural.
Entre las regiones del país presentes en la Feria de Bogotá, se destaca por su nutrida participación y por la calidad de sus propuestas, la del Caribe, a través del Observatorio del Caribe, Ediciones Pluma de Mompox y las principales universidades públicas y privadas.
Se destaca el esfuerzo inmenso de Ediciones Pluma de Mompox, que presentó una colección de 65 libros de diferentes géneros y diversidad de autores.
También hay que resaltar la participación de la Universidad Tecnológica de Bolívar y el Observatorio del Caribe Colombiano, que organizaron el panel “El Caribe Colombiano en la Independencia Nacional”, moderado por Alberto Abello, con la participación de Adelaida Sourdís, Adolfo Meisel, Jorge Conde y Sergio Lozano, y la presentación de la Expedición Padilla, una idea de la Tecnológica, que busca rescatar hechos históricos a través de la investigación.
Igualmente la Universidad Jorge Tadeo Lozano, seccional del Caribe, participa con la presentación de “La Mochila Audiovisual del Caribe”, producto de una investigación realizada por el Observatorio del Caribe y el Ministerio de Cultura, a la cual se vinculó la Tadeo Lozano como entidad encargada de su diseño, gestión y elaboración. Se trata de 24 obras documentales y de ficción realizadas desde el año 2004 en Bolívar, Córdoba, Magdalena, San Andrés y Providencia, Sucre, Cesar y La Guajira, con sus fichas técnicas y sinopsis, y una guía de programación. Simultáneamente se presentará un libro sobre esa investigación.
Satisface que nuestra región deje ver toda su capacidad de crear saberes y proponer contextos de lectura, contribuyendo de esa manera al propósito de que Colombia lea más y consuma cultura como hábito.
Aprovechando los esfuerzos exitosos de la Administración por desterrar el analfabetismo, en Cartagena convendría desarrollar programas de lectura para exponer a la población a la mejor literatura del país y del mundo.
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